En una modalidad multiplataforma por el coronavirus, televisión, Zoom e Internet, La Sultana realizó su remate tradicional Brangus con compradores de Colombia, Paraguay, Brasil, Ecuador, Bolivia, Uruguay y de la Argentina.
Con un promedio de $625.862, se vendieron 29 lotes de hembras destacadas, asimismo se comercializaron 28 embriones a un valor de $87.857 de promedio. Por la subasta, la firma de la familia Groppo tuvo una facturación de más de $19 millones, casi duplicando las ventas del año anterior.
La aplicación de las nuevas tecnologías para la raza tiene el objetivo de mejorar la promoción y comercialización de los reproductores y en esta ocasión permitió a los compradores internacionales seguir el ritmo del remate de manera virtual y además tuvieron a disposición los catálogos en la página días antes de la venta.
La venta, a cargo de Juan José e Ignacio Enrico, tuvo lugar en Bell Ville, donde se encuentra la cabaña.