Según un trabajo de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) , la sequía le ocasionará a la cosecha gruesa del campo una pérdida de 87.000 millones de pesos o 4350 millones de dólares. El cálculo se realizó teniendo en cuenta la baja en el promedio de los rendimientos esperados y las áreas de siembra que se perdieron, pero sin contemplar el efecto en la calidad de los granos.
Para CRA, la situación de escasez hídrica es similar a la de 2009, ya que afecta a casi la totalidad de la región pampeana. En algunas zonas de la región núcleo afirman que es la peor de los últimos 70 años.
Hay un 65% del área núcleo agrícola con cultivos en una condición de mala a regular. "El maíz temprano resulta el más perjudicado, seguido por los maíces de segunda, la soja de segunda, la soja de primera y el girasol, todos con guarismos cercanos al 60% de condición mala a regular", afirma el trabajo.
Matías Lestani, a cargo del Departamento de Economía de CRA, dijo a LA NACION: "El golpe económico ya se empieza a sentir en el interior del país donde la venta de insumos y semillas para maíz de segunda y soja de segunda cayeron debido a la complejidad de la situación".
"El daño crítico ya se hizo: si no llueve en estos días se va a incrementar un poco el número (de pérdida), pero va a rondar los 4350 millones de dólares".
El trabajo recuerda que cuando a mediados de septiembre del año pasado había pronósticos de que “La Niña” mostraría su impacto en el otoño de 2018, no se esperaba que fuera con tanta contundencia y que se adelantaría. En rigor, los registros con bajas en las precipitaciones comenzaron en noviembre de 2017.