De la huella de carbono a la tokenización de los granos: cuáles son las propuestas que irrumpieron para el campo

En un evento realizado en el Malba por AZ Group y Consultatio, un grupo de expertos en blockchain explicó la importancia de la adopción de las tecnologías agrícolas y cómo estas serán fundamentales para no quedar afuera de los mercados ante la demanda de la sociedad. La reducción de la huella de carbono, la tokenización de granos y la disminución de los riesgos fueron los temas centrales que dieron inicio a la jornada.

Lucas Brunone, director BlockAnt, habló de la importancia del uso de la tecnología de registro para reducir la huella de carbono a través de la consultoría integral. El experto indicó que, a partir del registro de los datos, es importante mencionar tres palabras fundamentales para incorporarlo: la reducción, la adaptación y la compensación.

“Lo primero que hay que pensar es qué hacemos para reducir los gases de efecto invernadero. Esto es ciencia. Ninguna de estas cuestiones se puede analizar aisladamente sin tener en cuenta el contexto y otras disciplinas y actividades, si no nos vamos a quedar cortos, porque los desafíos que tenemos enfrente son complejos”, dijo en el evento.

En ese sentido, indicó que lo primero que se tiene que hacer es “bajar es el dióxido de carbono”.

“Es uno de los gases que componen a los gases de efecto invernadero y es el de mayor cantidad y el que mayor tiempo tarda en degradarse en la atmósfera y producen o aceleran el calentamiento global”, amplió. También explicó que todos los procesos humanos liberan carbono. “Nosotros respirando liberamos carbono, las plantas respirando limpian el carbón; la producción de bienes y servicios van dejando una huella. Por eso, tenemos que medir”, destacó.

La medición de la huella de carbono, explicó, se realiza a través de un reporte que se llama inventario de gases de efecto invernadero. “No es que los gases de efecto invernadero no están solo compuestos por el carbono; es el primero que hay que reducir. A través del Acuerdo de París coincidimos en que, si uno emite 10 y otro emite 8, el que emitió 8 y tenía un límite de 10 le puede ceder 2 al que emitió 12. Eso es un mercado regulado de la Unión Europea, donde hay un ente regulador específico que controla esto y le dice una industria: ‘Para el 2023, vas a poder emitir tanto y es en toneladas de carbono’. Le da permisos accionarios”, afirmó en la jornada de AZ Group y Consultatio.

Brunone indicó que la Argentina está en el top 10 del uso de blockchain en el mundo, y que el tiempo en el que se adoptan estas tecnologías es el tiempo de la necesidad.

En tanto, Santiago del Carril, Chief Commercial Officer de Agrotoken, una startup de tokenización de granos y alimentos, habló de cómo convertir los granos en un activo digital, a partir de la tokenización. “Es el proceso de convertir ese activo real en un activo digital y nosotros lo que creamos es la primera plataforma de tokenización de agrocommodities para que todos los productores y los distintos jugadores del ecosistema agro puedan transaccionar y hacer todo lo que hacen todos los días de una manera más eficiente, más transparente, ágil, y al menor costo”, detalló.

El experto también explicó que la idea es darle la posibilidad de tener nuevos usos a los granos a partir de la tecnología. “El productor utiliza el grano como moneda acá en Argentina y en todos los países más importantes del mundo en términos de producción de agrocommodities. Y lo que hacemos es a través de un proceso de tokenización de ese grano lo convertimos en un activo digital, mediante una prueba de reserva de granos”, dijo. A través de este sistema también se pueden generar préstamos e intercambios, ya que el grano “es visible”.

Por otra parte, destacó que hay una mirada integral con la cadena, porque comenzaron a trabajar con un token de kilos de carne, que tiene una mirada integral, pero de financiación. “Estamos por sacar un token de silobolsa y viendo tanto en Argentina como en Brasil de generar token de energía a partir de la conversión agro”, amplió.

Jimena Costa, especialista de crédito en la banca rural de Rabobank Argentina, señaló que, desde la cooperativa que tuvo su origen en Holanda, tienen una visión de transición para acompañar la dinámica de los productores que están preocupados por minimizar los riesgos. “El desafío y el valor agregado es desarrollar en conjunto con la cadena el conocimiento y los productos esa transición. Los registros son los datos que estén perfectamente integrados con la información que alimente al banco, que pase a una integración y una toma de decisión conjunta para anticiparnos a los problemas”, detalló.

Más allá del concepto que se tiene de sustentabilidad, Costa indicó que ven todo lo relacionado con el bienestar animal, la tierra, el capital humano, la relación con las comunidades. “Eso es sustentabilidad, es más profundo de lo que uno cree. Esto no está escrito en piedra, es más dinámico. Es un plan y ver hacia dónde hay que ir. Hay objetivos, metas, por ejemplo, para el 2030, 2040, pero primero hay que ver hacia donde ir”, dijo y sostuvo que la tecnología es el camino, ya que es la clave para no quedar fuera de los mercados. “Hay que ver lo que le está pasando al productor y a la cadena apalancándonos de una base de los clientes de todo el mundo”, señaló.

“No elegimos nosotros el camino a la sustentabilidad, los consumidores lo van a demandar. Llegar temprano siempre es una ventaja competitiva. Obviamente, siempre requiere de una evangelización previa para generar confianza. Hoy puede ser soja, maíz, trigo, y mañana podría ser tierra. Desde el lado transaccional hoy lo veo como una oportunidad”, sintetizó.

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