El Gobierno resolvió cerrar el registro para anotar exportaciones de granos al exterior, conocido como Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE), lo cual significa que es inminente una suba de las retenciones tal cual venía trascendiendo para la soja, del 30 al 33%.
En una comunicación al sector exportador, que hizo desde su página de Internet, el Ministerio de Agricultura de la Nación informó que el registro estará cerrado temporariamente. La información circuló como reguero de pólvora por diferentes grupos de Whatsapp de productores, técnicos y expertos del mercado y generó conmoción en el mercado. En diciembre pasado, el Gobierno también cerró el registro para subir del 24,7 al 30% las retenciones a la soja, además del 6,7 al 12% en trigo y maíz. Cálculos privados indican que el Gobierno podría recaudar entre 400 y 513 millones de dólares extra subiendo tres puntos los derechos a la soja. En tanto, en el sector de la producción alertan que la medida podría llevar a la baja de unas 400.000 hectáreas en la próxima campaña de siembra, 2020/2021.
En este contexto, la Mesa de Enlace, que mañana tiene cita a las 16.30 con el ministro de Agricultura de la Nación Luis Basterra, insistirá en el rechazo a otra suba de 3 puntos en las retenciones a la soja y reclamará un cronograma de reducción de los derechos de exportación.
Sobre esto pondrán foco los ruralistas de la agrupación que integran Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), la Sociedad Rural Argentina (SRA), Coninagro y la Federación Agraria Argentina (FAA). Algunos ya hicieron contacto con el ministro para expresarle el rechazo del sector a más retenciones.
"Se le transmitió al ministro que con el 33% es inevitable el conflicto. Pedimos algún cronograma de rebaja porque con esto no paramos a la gente; vamos al conflicto directo", señalan fuentes de la Mesa de Enlace al tanto de contactos entre los ruralistas y Agricultura.
Los productores, muchos autoconvocados que no responden a las entidades tradicionales, vienen realizando asambleas y tractorazos en el interior para hacer visible el descontento con las retenciones. En varias de esas movilizaciones hay una confluencia con productores de las entidades. Esta noche se hará un encuentro en Charata, Chaco, el sábado productores cordobeses realizarán un tractorazo en Bell Ville, y el lunes próximo productores de Tucumán iniciarán un cese de comercialización por una semana. Además, el 10 de marzo productores del norte harán una marcha denominada "casillazo" con camionetas y casillas rurales que terminará al día siguiente en San Nicolás para una asamblea nacional.
En todas las movilizaciones ya realizadas salió un rechazo a cualquier suba de las retenciones y un pedido de un cese de comercialización a nivel nacional. La Mesa de Enlace estaba evaluando eso la semana pasada, pero lo frenó a la espera del encuentro con Basterra.
Los ruralistas insisten que el campo ya aportó, solo por retenciones, unos US$100.000 millones desde 2002. La previsión es que este año, según cálculos de Néstor Roulet, productor, el Estado podría quedarse con US$7200 millones, esto es considerando una eventual mayor presión impositiva. Por estas horas diversos estudios alertan que una suba de retenciones golpeará a las zonas más alejadas de los puertos y terminarán cayendo tanto la inversión como el área sembrada. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estima que podría haber una retracción de 400.000 hectáreas en la siembra de soja en la próxima campaña.
En las concentraciones en el interior no solo se expresa el rechazo a más retenciones, sino a la mayor presión impositiva en general. En el sector señalan que ya pagan, si bien no son todos los mismos en todas las provincias, un total de 36 tributos. Son 16 nacionales, más 13 provinciales y 7 municipales.
Según trascendió, el Gobierno mantendría los derechos al trigo y el maíz, hoy en 12%, en tanto que avanzaría en definiciones para las economías regionales. De acuerdo a la ley de emergencia económica que aprobó el Congreso en diciembre pasado, las economías regionales no deben superar 5%.
En la actualidad, según un relevamiento de Federación Agraria Argentina, casi todas las frutas, limón, uva manzana, pera, ciruela, berries, jugos, quesos, verduras y hortalizas, frutas secas, vinos, aceite de oliva, cueros, entre otros productos, pagan el anterior esquema de retenciones de $3 por dólar cuya alícuota efectiva termina siendo hoy, por las sucesivas devaluaciones, un 5% o algo menos según los productos.
En tanto, miel, legumbres, leche en polvo, arroz y pasta de madera, entre otros productos, pagan un 9%. En esta línea, una eventual baja a 5% se sentirá más sobre estos casos antes que el resto de los productos que ya tienen una tasa efectiva del 5% o cercana a ella.