La producción lechera viene atravesando una prolongada crisis que se agrava año a año, con aumento de costos mayores al aumento del precio de la leche. En el último año, la reducción de tambos fue muy significativa: un promedio mayor a un establecimiento por día. Los datos se desprenden de un informe técnico realizado por Coninagro.
Según el documento, poco más de 10 mil tambos son los que generan la producción de leche en la Argentina: 10.731 unidades productivas, de acuerdo a datos de septiembre de 2018. "En el último quinquenio, la reducción de tambos se dio a una tasa del 2,3% anual y la cantidad de vacas disminuyó a una tasa del 7,2% anual, totalizando actualmente 1.584.962 animales", indica Coninagro.
Sin embargo, a pesar de la crisis que atraviesa el sector, la producción por tambo se incrementa "paulatinamente", considerando que el tambo promedio argentino alcanzó en 2018 los 2700 litros de leche diarios, un 10% adicional al año anterior (en la última década 2008-2018 promedia un 2% de aumento).
Costo, precio y resultado de producción
"La actividad producción de leche atraviesa un período negativo que se prolonga en el tiempo. Para el caso modelo de escala media, ubicado en la región centro de Santa Fe, durante lo que va del año 2018 se pierde entre 10 y 20 centavos de peso por cada litro producido. Esta situación se agrava día a día porque se va acumulando deuda tomada para pasar este período", dice la entidad.
Además, agrega que durante el último año el productor viene percibiendo un precio por la leche producida "muy por debajo del promedio" cobrado en los últimos años en moneda constante (según datos de septiembre 2018).
"Aunque en los últimos meses el precio se ha recuperado, viene corriendo detrás de la inflación. En términos de precio en dólares, actualmente la leche se paga 20 centavos de dólar, cuando el promedio de los últimos 5 años es cercano a los 40 centavos, siendo una baja muy significativa. El precio de la leche al consumidor es uno de los bienes que menos ha mostrado aumentos en el último año: registrando una suba del 17% versus 40% de Inflación Minorista (Indec)", afirma el documento.
Consumo
En el sector, el consumo interno es el principal destino de la producción de lácteos (un 85% del total) y pese a "algunos altibajos" Coninagro indica que el consumo se ha mantenido en torno a los 200 litros equivalente leche por habitante y por año en la última década, algo por debajo del final de los 90 y por encima de los primeros años de 2000.
"Se observa una leve tendencia decreciente en el consumo total de lácteos, debido al estancamiento de la producción que no alcanza a cubrir el aumento de la población", afirma.
En tanto que las ventas al mundo de productos lácteos argentinos han ido disminuyendo en los últimos años, desde los 3000 millones de litros equivalente leche en 2013 a unos 1500 millones en 2017 (representando este último año un 15% de la producción).
En lo que va de 2018 se ha logrado un incremento de las ventas externas lo que podría revertir la tendencia negativa de los últimos años. Los principales destinos de la exportación de lácteos son Brasil y Argelia (75% del total), en segundo lugar se encuentran Rusia y Chile, y como terceros destinos Paraguay y China.
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