El ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, anunció que se invertirán $1000 millones para la agricultura familiar con el fin de fomentar la producción, elaboración y distribución de alimentos. La noticia la dio durante la presentación del Programa Sembrar Soberanía Alimentaria, que llevó adelante junto a la secretaria de Inclusión Social, Laura Alonso.
"Con sembrar soberanía alimentaria transferiremos más de mil millones de pesos a provincias, municipios y organizaciones para que generen proyectos productivos. Esto es trabajo, es reconstruir las condiciones para que haya movilidad social ascendente, y es un salto en la política alimentaria, es ir más allá de la asistencia y la cobertura y apostar por la calidad nutricional", aseveró Arroyo durante el lanzamiento.
El programa se dará a través del Plan Argentina contra el hambre, que se apoya en el fortalecimiento de las acciones relacionadas con el acceso a la canasta básica de alimentos. Esta herramienta apunta a favorecer aquellas experiencias que impulsan su transición hacia una producción agroecológica.
Durante la presentación del Programa que se realizó de modo virtual, participaron entre otras figuras del ámbito político y social, la titular del INTA, Susana Mirassou; el presidente del Mercado Central, Nahuel Levaggi; el titular de Acumar, Martín Sabatella; la diputada nacional Daniela Vilar; los diputados nacionales José Aragón Ruiz y Federico Fagioli; y el intendente de San Vicente, Nicolás Mantegazza.
El plan propicia el fortalecimiento de los procesos organizacionales y de gestión de las unidades productivas vinculadas al sector alimenticio, así como la consolidación del entramado territorial de productores a partir de redes de producción, elaboración y distribución de alimentos para el abastecimiento local y regional, según advierten en el comunicado.
El programa busca fortalecer la institucionalidad, la producción de alimentos, el acceso al agua y el abastecimiento local. Y la inversión apuntará a maquinaria, herramientas, insumos, acondicionamiento de espacios productivos y de distribución, capacitación, asistencia técnica y logística. Además de promover la producción agroecológica y las experiencias de transición hacia la agroecología y el fomento de las buenas prácticas de producción, elaboración y distribución de alimentos.