Máquinas que ya reemplazan y reemplazarán a humanos en el futuro. Las perspectivas de la Inteligencia Artificial (IA) en la Argentina fue el tema de debate en la charla "Los algoritmos al servicio del Agro", un encuentro que organizó el INTA junto al Instituto para la Integración de América Latina y el Caribe (Intal) del sector de integración y comercio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Gustavo Béliz, director del Instituto para la Integración de América y el Caribe (Intal-BID) hizo hincapié en que América Latina necesitará de modo imperioso la utilización de la IA. "La Inteligencia Artificial está comenzando a ser usada en modo masivo por los receptores de nuestro comercio exterior como es el caso de China. Seguimos muy de cerca la evolución de este tema en otros países y el impacto que ya comienza a tener. La apuesta estratégica por la IA es muy grande y va a continuar siendo muy acentuada en el futuro cercano", afirmó Béliz al dar inicio al encuentro.
Además, destacó que el aspecto social es muy importante en este tema. "En el BID sostenemos que la IA es una dimensión tridimensional porque va a haber destrucción de empleo, está ocurriendo un desplazamiento del empleo y también se están creando nuevas oportunidades laborales", agregó.
Según definieron, no existe una única definición sobre IA. "No es una tecnología específica, ni pertenece a una clase específica de enfoques técnicos. Más bien, es un campo que estudia el problema general de crear inteligencia en las máquinas", explica un documento del INTA.
Durante el panel de disertación "Argentina en busca de la agricultura exponencial", Guillermo Salvatierra, CEO y gerente general de Frontec, explicó que en el caso de la agricultura la IA permite realizar innovaciones como usar de modo intensivo datos históricos de la performance de los cultivos en determinados lotes, con el fin de identificar los ambientes o la productividad potencial para tomar mejores decisiones.
Además, explicó que los suelos son heterogéneos y que a esa variabilidad hay que sumarle la variabilidad del clima. "Esto nos permite hacer la IA: juntar una enorme cantidad de datos y hacer ciencia para poder entender de qué manera, utilizando de un modo inteligente la información, podemos conseguir mayor productividad, no vía insumos sino vía información. De esta forma se busca tomar mejores decisiones en base a lo que podemos aprender de la historia y de la información del estado actual de los cultivos", afirmó Salvatierra.
El profesional destacó la importancia de obtener datos de calidad y ser "capaces de poder relevar en cada punto del cultivo información de interés", como por ejemplo la respuesta espectral de las plantas, el nivel de humedad en los suelos, la temperatura, las precipitaciones, entre otros factores.
Frontec es una compañía que es propiedad de Invap. "La plataforma recupera y reúne una enorme cantidad de datos, desarrolla algoritmos que permiten generar productos útiles para el productor, convertirlo en un software y entregar productos a través de un dispositivo móvil al productor para que vaya al lote y pueda tomar una decisión aún sin Internet", dijo Salvatierra, quien además afirmó que en la campaña que acaba de concluir Frontec brindó distintos tipos de servicios en aproximadamente tres millones de hectáreas, con unos 5000 productores del país.
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