LAS GRUTAS, Río Negro. Hace dos décadas, Olivos Patagónicos hizo punta en la Patagonia: fue la primera plantación productiva de olivos en el sur argentino, la "más patagónica" de todas. Hoy, por su calidad, el aceite que fabrican es usado por los principales chefs del país.
En Las Grutas, a 600 metros del mar, en 2001 se plantaron de forma experimental 700 árboles con plantines traídos desde Mendoza. Ahora son 10.500 en 28 hectáreas y producen unos 15.000 litros de aceite de oliva y una menor cantidad de aceitunas de mesa.
Carlos Sywaln, uno de los dueños, explicó a LA NACION que el olivo se adaptó "muy bien; es noble y rústico y funcionó en este tipo de suelos, en este clima de veranos calurosos e inviernos suaves, tipo mediterráneo, con influencia del mar". El emprendimiento es de una sociedad anónima.
La variedad es arbequina, que es la que mejor prospera en la región marítima de la Bahía de San Antonio. Tras comprobar que el árbol se adaptaba, instalaron una planta de producción donde el aceite es prensado en frío.
El aceite -que se vende en presentaciones de un cuarto de litro, medio y un litro y en bidones para restaurantes- fue reconocido por el chef Guido Tassi cuando llegó a Las Grutas para grabar un programa de televisión.
"Impulsó su uso en los mejores restaurantes del país, como la parrilla Don Julio", contó. El establecimiento quedó en el puesto 55 en el Mundial de Restaurantes de este año.
"Su baja acidez, su color y su cuerpo que hacen a su buena calidad lo convierten en un aceite de primer nivel -señaló Sylwan-. Participamos en ferias y atendemos el mercado interno; vendemos en la misma chacra, donde hacemos visitas guiadas".
Comentó que, en 2009, cuando empezaron a tener volumen para exportar, el contexto macroeconómico no era bueno y "ahora, cuando hay un trabajo desarrollado en el plano local, los costos siguen haciendo difícil vender afuera".
Después de Olivos Patagónicos, empezaron otros proyectos en la región y en Neuquén. "Fuimos creciendo en base a calidad, a recomendaciones. Somos un producto kilómetro cero", ilustró.