Punto por punto: qué está en juego en la pelea Gobierno-Ciudad de Buenos Aires

En la guerra por los millones de pesos de coparticipación entre Nación y Ciudad ya se metieron al menos media decena de actores secundarios. Las ofensivas y contraofensivas incluyeron a entidades financieras, al Banco Central y, desde hoy, a Diputados, que aprobó con cambios la revisión de la quita de recursos para el gobierno porteño.

El enfrentamiento por al menos $52.000 millones comenzó el 9 de septiembre, día del famoso anuncio que "tomó por sorpresa" al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. El Presidente advirtió que le quitaría un punto de la coparticipación a la Ciudad y se lo daría al gobernador bonaerense para lo que llamó "Fondo de Fortalecimiento Fiscal". Al otro día, se publicó el decreto que hoy el gobierno porteño discute judicialmente ante la Corte Suprema.

Pero la verdadera contraofensiva de la Ciudad llegó un mes y medio después, a mediados de noviembre, cuando el gobierno de Larreta anunció un "presupuesto de contingencia" con fuerte reducción del gasto público, suspensión de obras y revisión de grandes contratos, que reducirían el gasto en $32.300 millones, y nuevos impuestos, que implicarían un aumento de la recaudación en el orden de los $19.700.

Ese último punto fue el que crispó los ánimos con los bancos con sede en Capital, pero especialmente con el Banco Central. El gobierno porteño quiere eliminar de la exención de Ingresos Brutos a las Leliqs (Letras de Liquidez) y a las operaciones de pases, dos instrumentos que el Banco Central utiliza para hacer política monetaria y mantener a raya la inflación. Este tributo afectaría directamente a los bancos radicados en la Capital Federal.

Una semana después, Miguel Pesce, presidente del Central, escribió una carta en la que advierte que la Ciudad "no puede aplicar impuestos a la política monetaria". Para el funcionario, con la posible implementación del impuesto a las Leliqs y a las operaciones de pases el Gobierno de la Ciudad está afectando un instrumento que la autoridad monetaria utiliza para mantener a raya la inflación.

Sucede que, para compensar esa alícuota que grava las Leliqs y las operaciones de pases, que implicarían una pérdida para las entidades financieras, se abrirían dos caminos: o bien podrían compensarse con mejores tasas por parte del Central, algo delicado en este contexto, o con el encarecimiento de los productos que ofrecen los bancos a sus clientes.

Por otro lado, el gobierno porteño anunció una medida que generó menos polémica a nivel institucional: aplicará el impuesto a los Sellos a las tarjetas de crédito con una alícuota del 1,2% que se sumará a los resúmenes. Fuentes de la Ciudad argumentaron que es un gravamen en el que se buscó la "armonización" con otras jurisdicciones, como la provincia de Buenos Aires y Córdoba, donde hoy ya se recauda, y que no necesariamente implicó allí una caída del consumo con plástico.

La Ciudad estima que la quita de la coparticipación por decreto implicaría una pérdida de $52.000 millones en 2021, y además proyectaba que el proyecto de ley que se aprobó hoy en Diputados -y que volverá al Senado para su revisión- restaría unos $13.000 millones menos. Sin embargo, el texto final de esta mañana propone que la Nación y la Ciudad abran una instancia de negociación de 60 días para avanzar en un convenio que defina el monto de la transferencia anual para solventar el traspaso de la policía a la Capital, por lo que el monto final que está en juego todavía no está claro.