El Paraná, estela de la exportación
La mayoría de la carga con destino internacional navega por el lomo de este río; los emprendimientos
ROSARIO.– En las proximidades del puerto, en la vereda del río, las cañas de los pescadores caen como látigos sobre el agua, que mantiene una inmutabilidad casi ajena. En el último tiempo, signado por la crisis económica, la recreación dio paso a la necesidad y el número de estos hombres que ahora llegan al lugar, con la esperanza de comer clavada en el anzuelo, se multiplicó.
Mientras, allá en el lomo del Paraná, entre los kilómetros 376 y 480, navega el mayor movimiento de cargas con destino de exportación. Unos 14.000 buques comerciales lo transitan anualmente.
"Sólo en enero registramos 90 buques de ultramar que tenían como destino a Diamante, San Lorenzo, Rosario y Arroyo Seco para luego seguir a puertos nacionales o de Brasil, España, Egipto Japón, Cuba, Dinamarca o Túnez", explicó a La Nación el prefecto mayor de Zona Bajo Paraná de la Prefectura Naval Argentina, Gustavo Mario Bourilhon.
En sus bodegas viajan aceites vegetales, cereales y subproductos, hidrocarburos y minerales argentinos a todas partes del mundo. La competitividad de los puertos privados como la Terminal VI en Puerto General San Martín o Punta Alvear, Tradigran y Dreyfus Ltda. en General Lagos se fue consolidando con el tradicional movimiento cerealero. Pero también las frutas retomaron sus envíos desde el puerto de Rosario a partir de mayo.
Limones y madarinas
El buque East Sea partió con 2600 pallets de limones, mandarinas y pomelos con destino a Grecia y Ucrania, seguido por el Sun Emilia, que zarpó el 28 del mismo mes con manzanas, peras, limones, pomelos y mandarinas hacia Holanda, Polonia y Rusia.
La seguridad de la navegación está a cargo de la Prefectura, que hace las veces de guardián del río, en un trabajo que comprende desde la comunicación con el tráfico fluvial hasta la inspección del buque y su tripulación.
Muy cerca de Rosario, en la localidad entrerriana de Diamante, su puerto se alza en el camino de la hidrovía. La culminación de los trabajos de dragado del río Paraná hasta Puerto San Martín y la incorporación del tramo hasta Santa Fe de 28 pies de calado lo colocarán en una inmejorable posición. En este puerto, los buques que trabajan son en su mayoría Panamax y es aquí el punto más al norte de la Mesopotamia donde pueden ingresar estos gigantes. Su actividad se complementa con la carga de soja en barcazas, para molienda, y con la posterior exportación de aceite vegetal.
A partir del dragado de la avenida que conforma la hidrovía Paraná-Paraguay, el flujo de barcos y mercancías de la zona se incrementó.
Es por ello que, la Subprefectura Diamante modificó e incrementó las condiciones de seguridad para el ingreso y egreso de buques de porte (la cual establece un máximo de 230 metros de eslora), por medio de la asistencia de remolcadores de puerto. Junto con el Ente Autárquico Puerto Diamante, han comenzado estudios y la recopilación de elementos técnicos para la actualización y modificación del emplazamiento de una nueva rada para la operación de buques de ultramar, debido a la transformación morfológica del lecho y el canal navegable del Río Paraná sobre su actual ubicación, con el incremento del tráfico fluvial.
En la zona, existen grandes historias de pequeñas empresas que buscan acercar sus productos a más clientes. Quinta de Serrano es uncaso. Gloria Trossero y Carmen Albornoz , dos amigas que la crearon después de pensar que sus licores artesanales eran dignos de ser degustados por muchos más que sus amigos.
Cooperativa Apícola Diamante Limitada también es un signo de la voluntad y el esfuerzo por acercar una propuesta argentina al exterior. Prepararon un canasta con miel, jalea real, polen, que presentan con velas y adornos diseñados con cera. Con calidad premiada y el aporte de la Municipalidad diseña su programa de expansión.
En el mismo departamento de Diamante, en Estación General Racedo, la planta procesadora de aves Calisa, del grupo Motta, sigue en la ruta de la exportación. Es una de las cuatro empresas de la industria avícola argentina que está en condiciones de ser auditada por los estados de la Comunidad Económica Europea (CEE) y que cumple con los requisitos para el tratamiento de carne por exportar a los países musulmanes. Y, según sudirector general, Augusto Motta, "pronto ampliarán la planta con una nueva inversión".