Montevideo se recuperó de la represalia argentina
Luego de la disposición 1108/13, que prohibió a los exportadores argentinos transbordar en el puerto oriental y desplomó la actividaden esa terminal, los tránsitos crecieron de la mano de la carga paraguaya
MONTEVIDEO (El País/GDA).- En los primeros cinco meses del año, el puerto de Montevideo movilizó 129.431 TEU, frente a los 109.663 del mismo período de 2014, según datos brindados por el Centro de Navegación. Eso significó un crecimiento de 18% en el período observado. Y revierte números negativos que se venían verificando desde fines de 2013.
En ese año, el 29 de octubre, la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables argentina adoptó la disposición 1108. En ella, además de limitar el tamaño de los convoyes con barcazas que circulaban por la hidrovía como una manera de perjudicar la actividad del puerto de Nueva Palmira, prohibió el transbordo de mercadería argentina en puertos uruguayos. La decisión se fundamentó en una necesidad de fortalecer la actividad portuaria local, ya que muchos exportadores -principalmente los del sur argentino- optaban por enviar su mercadería en tránsito hasta Montevideo, para desde allí embarcarlas en buques de ultramar hacia su destino final.
Preferencia
Los argentinos preferían el puerto montevideano porque tenía mejores costos y una operativa más ágil. Fue por eso que, en los últimos años, los tránsitos de mercadería argentina tuvieron un incremento exponencial en el puerto. Pero allí aparecieron otros temas de relacionamiento político entre ambos gobiernos y, en respuesta a la decisión adoptada por el presidente José Mujica de autorizar un aumento de producción a la pastera UPM ubicada en Fray Bentos, el gobierno de Cristina Fernández -molesto por esa decisión- emitió la disposición 1108, que perjudicó así la actividad portuaria uruguaya.
El impacto se sintió durante el año pasado. A partir de allí, la Administración Nacional de Puertos (ANP) buscó alentar la llegada de una mayor cantidad de mercadería paraguaya en tránsito. Y esos movimientos de transbordos son los que actualmente sustentan los números positivos.
"La disposición 1108 es una medida negativa. Hay otras herramientas que la Argentina debe aplicar para competir con el puerto de Montevideo", dijo Oscar Vecslir, principal asesor en temas portuarios de Mauricio Macri, el precandidato presidencial opositor.
Interventor de la Administración General de Puertos (AGP) desde enero de 2010 hasta su remoción en julio de 2012, Vecslir se alejó del kirchnerismo para pasar a formar parte del equipo de asesores de Macri.
Además, actualmente ocupa el cargo de coordinador de la Sociedad Administradora del Puerto (SAP), que depende del gobierno de la ciudad de Buenos Aires.
"Patoteril"
"Ya cuando era funcionario nacional había un borrador con la idea de limitar los transbordos en Montevideo. Personalmente me opuse a esa idea: pedí no adoptar resoluciones de tipo patoteril, dado que lo que hace Uruguay es aprovechar nuestras debilidades y la fortaleza de ser puerto libre", señaló.
Vecslir sostuvo que para la Argentina no hubo beneficios con la disposición 1108 porque, de hecho, se registra una caída brusca de la carga en su país.
"En cambio, Uruguay resolvió muy bien el problema: prácticamente todo el transbordo paraguayo que se hacía en la Argentina se fue a Montevideo. La medida es de falta de solidaridad con un país hermano y deberíamos recomponer la relación. El daño ya está hecho desde el punto de vista normativo y habría que ver cómo pegar la vuelta. La Argentina necesita cambiar fuertemente sus reglamentaciones aduaneras. Ése es el primer gran escollo", sintetizó Vecslir.
El asesor de Macri expresó que la normativa no mostró ningún beneficio tangible para la Argentina.
"Más bien, todo lo contrario. [Provocó] un enfrentamiento con los hermanos uruguayos sin ningún beneficio interno. Por ejemplo, la dificultad más importante generada por esta resolución es el impedimento a cargadores del noroeste y nordeste argentino para llegar al puerto de Buenos Aires por vía fluvial. Ya casi no hay contenedores que vengan a Buenos Aires por agua. Vienen todos por camión y el costo es mayor", afirmó.
Marcha atrás
Para Vecslir, el próximo gobierno debería revertir la prohibición establecida por la administración kirchnerista.
"El cómo todavía no lo tengo claro. El primer paso es que se sienten a negociar autoridades de uno y otro lado para buscar los equilibrios. Como primer paso, deberíamos empezar a trabajar juntos. Hoy, si bien las relaciones parecieran armónicas, en la práctica es un combate cuerpo a cuerpo", manifestó.
El asesor de Macri señaló que el diálogo entre ambos países será fundamental en la búsqueda de recomponer la ríspida relación en materia portuaria.
"Hoy con Uruguay se dialoga, pero se trata de un diálogo de sordos. Hay que recrear un diálogo constructivo. Tenemos que salir juntos la Argentina y Uruguay, sumados a Paraguay y Bolivia, como la Cuenca del Plata. Por supuesto, la Argentina ha perdido mucho espacio y se siente dolida porque la marina [mercante] es totalmente paraguaya y los transbordos son uruguayos, mientras que la hidrovía y la draga es [costeada por] la Argentina. Es un esquema que la Argentina considera injusto", dijo.
Por eso, indicó, es necesario conciliar posiciones y dejar atrás los enfrentamientos.
"Hay espacio para todo el mundo. La Argentina hoy está cerrada al comercio exterior. Si Macri llega a la Presidencia, tiene el criterio de abrirse al comercio exterior y eso permitiría plantear un nuevo escenario", afirmó Vecslir.
Gustavo Stok y Maximiliano Montautti