Ricardo Yapur. "La aduana en planta da tranquilidad"
El presidente de Rizobacter habló sobre los beneficios de despachar desde Pergamino; inversiones e infraestructuras deficientes, las asignaturas pendientes
Hace algo más de dos años, Ricardo Yapur, presidente de Rizobacter Argentina, se enteró de una noticia que alteró algo más que el desayuno de ese día: un operativo en un puerto búlgaro, a orillas del Danubio, descubrió en un barco que había zarpado de la Argentina con destino a Holanda 67 kilos de cocaína escondidos en una cosechadora. "No sé en qué lugar del camino metieron la droga, pero me asusté mucho porque exportábamos el 15% de la producción y teníamos planes para incrementar ese número. Nuestra planta está en Pergamino y hasta ese momento se completaba el camión allá, el contenedor viajaba hasta Capital y en ese trayecto podían pasar muchas cosas. Por eso, ese mismo día empezamos a trabajar para tener una aduana en planta", cuenta. Dos años más tarde lo lograron. El mes pasado, autorización de la AFIP mediante, Rizobacter puso en marcha una aduana en su planta.
¿Qué aporta este sistema?
-Tranquilidad absoluta, porque el contenedor sale consolidado y precintado desde nuestra planta, y ese mismo número de precinto es el que figura en los remitos y facturas que acompañan la mercadería, el mismo que tiene nuestro distribuidor cuando abre el contenedor en Estados Unidos, China, Sudáfrica o Italia.
¿Cómo es operar hoy en el comercio exterior argentino?
-No es fácil. No son fáciles ni las importaciones ni las exportaciones, aunque las exportaciones deberían ser sencillísimas.
Lo eran hasta no hace mucho...
-Sí, pero ahora tienen sus bemoles, que básicamente están relacionados con algunas trabas para el ingreso de divisas en relación con el tiempo, por ejemplo, que en muchos casos no alcanzan a cubrir los tiempos que uno tiene desde que mandó la mercadería, se vendió y se financió en el comercio internacional. Tenemos que luchar para conseguir que el período de ingreso de divisas con la necesidad de dólares que tiene el Estado sea más largo y acorde con las formas habituales con que se maneja el comercio internacional. En las importaciones el problema son las declaraciones juradas, que en los productos relacionados con la soja realmente no tienen razón de ser. El campo exporta -entre lo que se lleva el Estado en retenciones, y los agricultores- US$ 30.000 millones de soja e importa entre US$ 1000 y 1300 millones. Deberían facilitarse todo lo que son las importaciones relacionadas con la producción de soja porque es la fuente de divisas por excelencia que tiene el Estado.
¿Qué es lo mejor y lo peor que le dejará el kirchnerismo al país?
-Hay cosas bien hechas en lo social, como la asignación universal por hijo y la incorporación de mucha gente de la tercera edad a la jubilación. ¿Lo peor? Veo complicado que se ha perdido una cultura del trabajo en los últimos tiempos y la falta de inversión. Hoy la Argentina sería capaz de producir 150 millones de toneladas de granos, pero si lo hiciéramos, ¿cómo los transportamos? No tenemos caminos, puertos, playas de estacionamiento en los puertos ni trenes. Si volviera ese dinero y pudiéramos pasar rápidamente a producir 150 millones de toneladas sentiríamos mucho esa falta de inversión e iríamos a un cuello de botella muy grande.
¿Por qué pudiendo producir 150 millones de toneladas el sector sigue estancado en 100 millones?
-Por la falta de inversión. Hasta 2008/2009 veníamos creciendo a un ritmo espectacular y una combinación de factores propio de algunos años climáticos complicados más la falta de inversiones de los últimos años cambió todo. Te das cuenta cuando observás que la venta de fertilizantes en los últimos años se mantiene o cayó, y lo mismo pasa en varios rubros. Siento que en los últimos años el productor está sembrando porque tiene que sembrar, no porque vea que está haciendo un buen negocio como lo hizo hasta 2009.
¿Qué le diría a la Presidenta si tuviera la oportunidad de plantearle cuáles son las dos medidas más importantes que necesita el campo para consolidar su crecimiento?
-Eliminar las retenciones de trigo y maíz -sé que son de bajo punto-. Las de soja son imposibles de sacar porque hoy tenemos un Estado muy grande que necesita financiarse y en la medida en que no toquemos el Estado no podremos tocar las retenciones de soja. Sacaría todas las trabas que hay a las exportaciones de trigo y maíz. El país vivió durante muchos años sin necesidad de poner trabas, exportando perfectamente y conviviendo muy bien el mercado interno con la exportación.
Perfil
Rizobacter es una empresa 100% argentina. Empezó a exportar en 1986, hoy tiene presencia en más de 20 países. Actualmente exporta 15% de su facturación, pero proyecta elevar la cifra a 30% en 2016. Su ciclo de facturación es julio-junio, en la campaña 2012-2013 fue de US$77,5 millones y la estimación para 2013-2014 es US$ 100 millones. Produce inoculantes para leguminosas, biofertilizantes, coadyuvantes, terápicos de semilla, cebos para el control de plagas y fertilizantes microgranulados.
Temas
Más leídas de Economía
Recompra de bonos. El Banco Central habría encendido ayer uno de los motores de emisión monetaria que había apagado
Minuto a minuto. ¿A cuánto cotizaron el dólar oficial y el blue este martes 23 de abril?
Para diciembre. Uno de los economistas más consultados por el círculo rojo pronostica un dólar a $1000