Crece la polémica por Lafsa

La llegada de LanChile a la Argentina, que, según un convenio con el gobierno argentino, debería hacerse cargo de los empleados de Líneas Aéreas Federales (Lafsa) está desnudando profundas divisiones internas en los gremios aeronáuticos respecto de la postura que deben adoptar ante la llegada de la aerolínea chilena.

Mientras las cúpulas de varios sindicatos ya acordaron el ingreso de sus afiliados a la futura Lan Argentina, varios trabajadores que se encuentran en la plantilla de la estatal Lafsa -creada para absorber ex empleados de las quebradas Dinar y LAPA-, rechazan el pase a la nueva línea aérea.

En medio de acusaciones cruzadas, esta semana circuló la nómina salarial de Lafsa, que da cuenta de que familiares de funcionarios del Gobierno y de sindicalistas forman parte de la plantilla. Ayer, la Asociación Argentina de Aereonavegantes (AAA) hizo suya la denuncia que ya habían ventilado políticos de la oposición. "Al menos 150 de los 855 empleados de Lafsa no pertenecían a LAPA ni a Dinar cuando se formó", señaló Ricardo Frecia, titular de AAA.

La diputada Alicia Castro, en tanto, anunció que demandará penalmente a las autoridades de Lafsa y al secretario de Transporte, Ricardo Jaime, mientras que el legislador Federico Pinedo aportó el listado de personas que están en estado irregular en su denuncia ante la Oficina Anticorrupción.

Según trascendió, en la lista de empleados figuraría la hija del secretario de Energía, Daniel Cameron -María Celeste- que nunca trabajó en LAPA ni en Dinar. También está el caso de Sergio Dotta, delegado de la Unión Personal Superior de las Empresas Aeronáuticas y uno de los principales colaboradores del Gobierno para la creación de Lafsa, que habría hecho ingresar en la empresa a su padre, Juan Ramón Dotta, y a su hermana, Claudia Susana Dotta.

Por otra parte, ayer también hubo protestas de varios sindicatos tanto en el Aeropuerto Metropolitano Jorge Newbery, como en Ezeiza.