Negocio hotelero. Dicen que Donald Trump tiene poco efectivo
El millonario responde que cuenta con suficiente liquidez como para mantener a flote todos sus negocios, incluidos los casinos
NUEVA YORK (New York Times News Service).- En momentos que la compañía de casinos de Donald J. Trump, Trump Hotels and Casino Resorts, va rumbo a una reorganización por quiebra, Trump tiene que invertir US$ 55 millones de su propio dinero en la empresa para conservar una importante participación. ¿Pero cuenta con esos fondos?
En una entrevista, el martes pasado, Trump sostuvo que tiene recursos netos de entre US$ 4000 millones y 5000 millones, cifra que sugiere que podría fácilmente invertir US$ 55 millones en una reorganización de su empresa de casinos. "Es dinero que tengo a mano", dijo Trump. "Estoy muy, muy líquido."
En realidad es casi imposible determinar en forma independiente a cuánto asciende la fortuna de Trump, dado que la mayoría de sus activos son inversiones inmobiliarias privadas que no está obligado a hacer públicas. Pero un examen de las finanzas de Trump sugiere que su afirmación de que es multimillonario puede ser, para citar a Mark Twain, grandemente exagerada.
Las tenencias de Trump, hasta hace una semana, valían US$ 34,5 millones. Sin embargo eso era así cuando las acciones hoteleras de Trump cotizaban a 2 dólares en la Bolsa de Nueva York. El martes, la acción se cotizó a 36 centavos y ese mismo día, el millonario comentó repetidamente que sus acciones de Trump Hotels representaban sólo alrededor del 2 por ciento de su riqueza; basado en el precio de las acciones previo a la quiebra, eso le daría recursos por unos US$ 1700 millones, muy por debajo de la cifra de US$ 4000 millones a US$ 5000 millones a la que aludió ese mismo día.
Pero incluso US$ 1700 millones puede ser una evaluación demasiado generosa de la riqueza de Trump.
Durante la mayor parte de su vida pública los casinos representaron un pilar fundamental de su riqueza, con una importante herencia de su rico padre y sus propiedades representando el resto de su fortuna. Pero anteriores roces con la quiebra personal forzaron a Trump a vender algunas de sus preciadas propiedades o ceder control de lo que quedaba a inversores externos, en particular un grupo de ricos financistas chinos. Si bien Trump aún posee algunas propiedades importantes, sus tenencias totales se han visto muy disminuidas.
Dos personas con conocimiento directo de la cuestión dijeron que, en medio de su anterior crisis financiera, Trump tomó entre US$ 20 y 30 millones prestados de la sucesión de su padre para aplacar a los acreedores. Trump desmintió eso el martes, aunque se negó a valuar la sucesión de su padre.
Lo que es más, mientras la mayoría de los multimillonarios no actúa en avisos publicitarios, Trump dijo que su ubicua presencia en la televisión no era sólo para promocionarse sino que le resulta lucrativo. "Otra gente rica no hace avisos publicitarios porque nadie se lo pide. Es como «The Apprentice» (su show televisivo). No se imagina cuántos de mis amigos ricos se mueren porque los ponga en el show", dijo.
Aportar o desaparecer
El Credit Suisse Group, un banco de inversión de Wall Street, que encabeza la reorganización por quiebra de Trump Hotels, ofrece prestar a Trump los US$ 55 millones que necesita para participar en el proceso. Pero Trump dijo que pensaba aportar él mismo los fondos. Si no aporta el dinero, su participación en la compañía desaparecerá en gran medida.
La fuente de la inversión de US$ 55 millones propuesta por Trump ha sido objeto de especulación entre los tenedores de bonos de Trump Hotels y analistas. Jane Padreira, una analista de ingresos fijos que cubre Trump Hotels para Lehman Brothers, se contó entre los varios observadores que piensan que Trump tendrá que tomar los fondos prestados.
Sin duda la reorganización de Trump Hotels tiene sentido en términos financieros. La empresa tiene casinos de primera en un sector en crecimiento y si el plan de quiebra logra reducir la carga de deuda de la compañía, Trump Hotels podrá financiar una modernización de sus propiedades. Que Trump participe de ello como propietario y no como simple agente de venta dependerá de esos US$ 55 millones.
Aunque los términos de la reorganización exigen que Trump ceda su puesto de CEO, Trump Hotels le paga un sueldo de US$ 2 millones para que se quede como presidente del directorio y ayude a promover los casinos. "Es bastante sorprendente que se le siga pagando sin capacidad ejecutiva, luego de que llevó la compañía a la quiebra", dijo Jeffrey A. Sonnenfeld, un vicedecano de la Yale School of Management y frecuente crítico de Trump.
No todos los tenedores de bonos de Trump Hotels han aceptado el plan de reorganización y eso aún puede hacer descarrilar el negocio. Mientras tanto, Trump dijo que pensaba meter la mano en su "chanchito" y mantenerse en el juego de casinos.