La máquina de imprimir billetes no cesa y los pesos se multiplican
La máquina de imprimir billetes no cesa y los pesos se multiplican. Muchos de ellos, como se sabe, terminan en gasto del Estado. Hoy, con una resolución de 374 páginas, el Gobierno aumentó el presupuesto en $12.064,1 millones. Entre sumas y restas, finalmente, la cuenta va a generar una desmejora en el resultado financiero de la Administración Pública Nacional de $8736,3 millones.
La cuenta grande esconde algunas particularidades. El día a día se come la inversión. De hecho, cuando se hacen las columnas de los movimientos de partidas dentro del Estado surge un elemento nada menor: los gastos corrientes, donde se suman los salarios de la administración pública y los subsidios, aumentan en $29.857,1 millones. Desde el otro lado, los gastos de capital, donde se cuenta la inversión pública, disminuyen $17.793,0 millones.
Como sucede desde el inicio de la cuarentena, el Ministerio de Desarrollo Social se llevó gran parte de la modificación. El presupuesto de la cartera que conduce Daniel Arroyo se incrementó en $39.712,4 millones. Solo para poner en perspectiva el enorme cheque que maneja el ministro. Inició el año con 92.636 millones de pesos para gastar. Con esta cifra, Arroyo, responsable de gran parte de las compras de alimentos para los sectores con menos ingresos, ya suma 239.958 millones. Dicho de otra forma, el cheque de Arroyo aumentó 139% en lo que va del año. ¿Cuánto gastó hasta ahora? Según datos de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP), la cartera ya utilizó el 62% de su disponible.
Para el Fondo de Garantía Argentino (Fogar) se destinaron $29.000 millones y al Fondo Nacional de Desarrollo Productivo por $10.000 millones, ambos dentro del programa "Financiamiento de la Producción" y en menor medida, dentro del Ministerio de Desarrollo Productico, aumentan las partidas para el Programa Formulación y Ejecución de la Política Geológico – Minera en $100 millones. El Ente Nacional Regulador del Gas aumenta su presupuesto en $603,7 millones para Gastos en Personal (+$489,5 millones), Servicios No Personales (+$109,0 millones), entre otros.
Detrás de Desarrollo Social viene el Ministerio de Salud, que aumentó las partidas en $14.625,8 millones de los cuales el Programa Formación de Recursos Humanos Sanitarios y Asistenciales se lleva $6791,7 millones. A su vez, para la compra de la vacuna contra el Covid-19 fueron 6605,4 millones de pesos y $821,8 millones a la Superintendencia de Servicios de Salud para Transferencias al Sector Privado para Financiar Gastos Corrientes.
Finalmente, la Jefatura de Gabinete. Desde ahora, Santiago Cafiero tendrá a su disposición $11.201,3 millones adicionales. De ese monto, $10.553,4 millones irán para transferir a las provincias y municipios para financiar gastos corrientes. Pero hay una trampa: de ese monto $10.018,6 millones para atender el "Convenio de Cooperación con la Provincia de Buenos Aires, vinculado al fortalecimiento de la seguridad de esa provincia. Para enviar a las universidades se destinan $346 millones y al Sector Privado $212,9 millones.
Otro de los ministerios que salió beneficiado es Cultura. Tristán Bauer y los suyos sumaron con la disposición de la Jefatura de Gabinete 2275 millones de pesos para sostener sectores de la cultura, con el fin de disminuir los efectos producidos por la pandemia generada por el coronavirus COVID-19, mientras que para el Programa para el Desarrollo y Fomento de la Cultura Ciudadana y la Economía Creativa fue un cheque de 314 millones de pesos.
El Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat es el único que no tuvo un solo peso de más. Apenas movieron 500 millones de pesos de lugar. Estaban en el programa Acciones de Vivienda y Desarrollo Urbano y ahora pasaron a Infraestructura Urbana. En medio de las tomas, un poco menos de dinero para viviendas.