Si se mira al país por regiones, es la zona pampeana la que registró la mayor tasa de desocupación en el primer trimestre de este año, según los últimos datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). En el conjunto integrado por las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos y Santa Fe, la tasa de personas que busca trabajo y no lo encuentran llegó a 10,2%, aunque en el conurbano bonaerense trepó a 12,3%. También es un hecho que se trata de la región con mayor nivel de actividad, medida como la proporción de personas que se declaran laboralmente activas, es decir, que trabajan o buscan activamente trabajar. El índice es, en esta parte del país, de 46,9%, con un pico en la ciudad de Buenos Aires, donde alcanza el 55,6%.
El desagregado de datos por centros urbanos, en tanto, arroja que la mayor desocupación laboral en la primera parte del año fue la que se dio en las ciudades de Ushuaia y Río Grande, en Tierra del Fuego, con una tasa de 13%. La Patagonia es una región con desempleo urbano de 7% y una tasa de actividad bastante más baja que la de la región pampeana: es de 42,9%.
La desocupación resultó aún más baja en la región del noreste, con un promedio de 4,5% en las ciudades de Corrientes, Formosa, Resistencia y Posadas. Pero una de las explicaciones es la baja tasa de personas activas, en comparación con el promedio de la Argentina: la tasa de actividad fue de solamente 39,2% y la tasa de empleo (cantidad de ocupados sobre la población total), de 37,5% (contra un 42,3% del conjunto de centros urbanos a los que llega la medición de la Encuesta Permanente de Hogares del Indec).
El noroeste, con un índice de desempleo del 9,5%, mostró el problema más elevado de subocupación: esta situación, que abarca a quienes trabajan menos de 35 horas a la semana, afectó en esta zona al 12,5% de los ocupados. Fue aquí también donde se verificó una de las mayores tasa de personas que están ocupadas, pero que, pese a ello, son demandantes de otro empleo: 20,6%.
El índice más alto de este último aspecto se dio en Cuyo, con el 21,8%. Allí el desempleo fue de 6,1% y la subocupación, de 12,1%.
Hay una característica en la que se diferencia la región patagónica del resto: es la única donde la tasa de desocupación resultó más alta entre los varones que entre las mujeres (con índices de 7,4% y 6,5%, respectivamente).
También las provincias del sur mostraron la tasa más elevada de asalariados sobre el total de ocupados: llegan a representar el 80,6%, mientras que en el resto de las zonas del país esa tasa ronda el 75%.
