En dos trimestres se triplicó el riesgo de impago bancario de las empresas

El riesgo de que las empresas deudoras del sistema bancario caigan en un incumplimiento de pagos se triplicó en los últimos dos trimestres.

Así lo advirtió ayer en un trabajo First Capital Group, una proveedora de servicios y asesoramiento financiero a empresas, tras analizar los datos que dejó el último informe de estabilidad financiera que publica semestralmente el BCRA .

En él afirma que la probabilidad de default estimada de las empresas se duplicó entre el tercer y el cuarto trimestre de 2018 (pasando de 0,5% a 1,1%), alza que se consolidó durante el primer trimestre de 2019, al alcanzar el 1,5%. "Es un máximo para este indicador desde 2004", explicó Augusto Quiñones, analista de esa compañía.

Quiñones advierte que esta tendencia continuaría, dada la lenta reactivación que se espera de la economía para los próximos meses y tomando en cuenta la persistencia de altas tasas de interés. "Además, porque los bancos recalifican a sus deudores con cierto rezago", acotó.

La probabilidad de default representa la porción de los créditos que estando inicialmente en situación regular (es decir, calificados 1 o 2) pasan a estar en situación 3, 4, 5 y 6 (irregulares) al final de cada trimestre.

En el caso de las familias, esta tendencia ya venía aumentando desde 2016, en parte producto de la flexibilización del acceso al crédito que se había logrado con la aparición del financiamiento en pesos indexados por inflación (ajustable por UVA).

"Si bien el nivel de endeudamiento de las familias es bajo en relación con el resto de la región, la deuda como porción de los ingresos subió de 2,4% a 3,2% de principios de 2016 a la fecha. En paralelo, hubo un progresivo aumento en la probabilidad de default, que llegó al 1,6% y llegó a niveles de 2008", dijo Quiñones.

La irregularidad general de los deudores bancarios privados creció del 1,5 al 5% entre marzo de 2018 e igual mes de este año. Y entre las compañías, el dato más relevante es que los morosos en situación de 3 a 6 (incumplimientos de mayores plazos) crecieron de 1% a 3,8% en el último año.