Impulsar el equilibrio entre vida y trabajo como vanguardia
Para los padres que trabajan, el cuidado de sus hijos es un problema prácticamente universal. Desde la finalización de la licencia por maternidad y hasta el ingreso a la escuela primaria, los padres necesitan alguien que se ocupe de sus hijos mientras ellos trabajan.
Si se ven obligados a dejar sus actividades por un período prolongado, por falta de ayuda familiar o apoyo económico para hacer frente al pago de una guardería o jardín de infantes, tendrán serias dificultades para reintegrarse al mercado laboral, en particular, en el mismo nivel en el que estaban cuando lo dejaron.
Demás está decir que este conflicto entre las obligaciones laborales y las familiares afecta fundamentalmente a las mujeres, y significa una barrera a la incorporación y permanencia en la esfera laboral. Es el caso del llamado techo de cristal, conocido desde hace años.
Por esta razón, las organizaciones comerciales y sin fines de lucro debemos implementar políticas que reduzcan el conflicto entre familia y trabajo, y que combatan la discriminación del mercado laboral por tener que atender la crianza de los hijos. No habrá igualdad de género en el ambiente de trabajo si no resolvemos esta clara necesidad que continua aún firme.
Desigualdad de género
Ser mujer vale, para el mercado laboral argentino, por lo menos 1000 pesos menos que ser varón. Esto habla a las claras de la desigualdad que existe. También las mujeres son las que más sufren el desempleo y la informalidad, y es claro que esto juega en contra de sus posibilidades de crecer en su carrera profesional y de alcanzar, algún día, posiciones directivas.
Un dato alentador es que el mundo del empleo en nuestro país en muchos casos está adelantado respecto de la legislación aún vigente, que establece una licencia por nacimiento de dos días corridos para los padres: alrededor del 40% de las empresas extiende los días otorgados por paternidad.
Así lo entendemos en Greenpeace. Desde hace un año, la madre o el padre de hijos menores de 5 años cobran un plus salarial para cubrir los gastos de cuidado del menor. Y ese plus salarial, para mantener su valor en términos reales, se actualiza cada vez que se aumentan los salarios por inflación.
A eso agregamos que extendimos la licencia por paternidad a 15 días, de modo que el padre comparta las tareas de cuidado con la madre durante las dos primeras semanas de vida de su hijo.
Queremos ser una organización de vanguardia que no sólo proteja el ambiente, sino que también esté a la altura de una filosofía que ubique a las personas y sus necesidades personales y profesionales en el centro de la escena.
El autor es director ejecutivo de Greenpeace
Martín Prieto