La Argentina acumula demandas en el Ciadi por US$ 20.000 millones
Son 24 causas que aún están pendientes de resolución, y en dos casos el Gobierno no cumplió con el pago de las sentencias
WASHINGTON.– La petrolera Repsol no parece estar mucho más cerca de cobrar los US$ 10.500 millones que le reclama a la Argentina tras haber concretado ayer su demanda ante el tribunal arbitral del Banco Mundial (Ciadi) . El país ya acumula allí demandas por más de 20.000 millones, sumadas a una fama de mal pagador y amenazas recurrentes en medios políticos de abandonar un tribunal al que se considera "demasiado cerca de las empresas y lejos de los gobiernos".
Si bien es cierto que, por el monto y la proyección internacional que tiene el expediente de Repsol pasa a ser el que más expone a la Argentina frente a la comunidad internacional, el país tiene allí, todavía, 24 casos pendientes de resolución.
"A la Argentina se le reprocha que no paga los fallos del Ciadi y no es cierto", dice el embajador Jorge Argüello. Pero, al igual que otros, el gobierno de Barack Obama discrepa en ese punto con la voz oficial del gobierno de Cristina Kirchner. Al extremo que fue el propio Obama el que firmó la orden que despojó a la Argentina de una serie de beneficios comerciales, como represalia por "no pagar", precisamente, un fallo del Ciadi a favor de dos empresas norteamericanas: Azurix y Blue Ridge.
Fue esa misma fama de mal pagador la que llevó a que Estados Unidos y otros países decidieran, como castigo, votar en contra de los créditos que la Argentina negocia ante organismos internacionales. Washington dejó en claro que la Argentina "debe pagar" los fallos del Ciadi si quiere resolver una situación que "afecta a la relación bilateral", según dijo en su momento la vocera del Departamento de Estado, Victoria Nuland.
Hasta ahora, las empresas norteamericanas no cobraron los casi 400 millones de dólares que, en conjunto, reclaman a la Argentina. Voceros del Gobierno hicieron saber que, luego de la represalia, ninguna de ellas "está más cerca" de cobrar lo que reclama.
"Uno de los problemas con el Ciadi es que se sabe cuándo empiezan los procedimientos, pero no cuándo terminan", dio ayer a LA NACION Ed Broadwell, experto en Derecho Arbitral de la Universidad de Wisconsin. En el caso de Repsol, la empresa había anticipado su intención meses atrás, pero debía esperar un plazo de 180 días para formalizar el expediente. También puede optar por retirar la demanda en el caso de que se le abran vías de negociación o de resolución paralela del conflicto.
"La Argentina no se irá del Ciadi", viene repitiendo el embajador Argüello. Desde que, días atrás, Venezuela formalizó su salida del organismo, muchas miradas se posaron sobre el paso que podría adoptar la Argentina. "El nuestro es un país que reconoce que las decisiones del Ciadi son definitivas y obligatorias, y deben ser cumplidas, como si se tratase de una sentencia firme dictada por un tribunal en el país", añadió.
No son pocos los que ponen esa continuidad en duda. "Políticamente, hay una presión creciente en algunos gobiernos de América latina, y la Argentina no parece ser la excepción", dijo Broadwell.
Días atrás, varios diputados de la oposición hicieron una presentación en el Congreso para que la Argentina abandone el tribunal internacional y ponga a revisión los "Acuerdos bilaterales de inversión", en los que se basaron buena parte de las demandas que llegó a acumular el país en su contra. La mayoría, por conflictos derivados de la falta de ajuste de tarifas en servicios públicos tras la salida de la convertibilidad.
En su momento, eso llevó a que la Argentina fuera el país con más casos abiertos ante el Ciadi. Hoy representa menos del 10% del total de causas que tramita el organismo según datos oficiales.
Galuccio vuelve a Londres
El presidente de YPF, Miguel Galuccio , participará de un seminario que organizará este viernes la embajada argentina en Londres. Entre otros, disertarán Carlos Bulgheroni (Pan American Energy), Javier Rielo (Total Austral) y Richard Brown, jefe de Schlumberger para la Argentina, Bolivia y Chile.