La inserción global, eje de un debate empresario

SALTA.- Con el fin de presentar una agenda común de acción a los gobiernos del G-20, en el próximo encuentro anual que se realizará en la Argentina a fines de noviembre, el sector privado llevó a cabo aquí el segundo encuentro del Business 20 (B-20). La necesidad de desarrollar la infraestructura y abordar el futuro de la tecnología y el empleo se hicieron presentes como los temas más importantes para discutir y generar acciones conjuntas para abordarlos.

José Urtubey, como anfitrión y principal impulsor de la realización del foro en el norte argentino, abrió la jornada y se refirió a la apertura comercial a la que tiende el país. "Tenemos que debatir cómo insertarnos inteligentemente al mundo, entendiendo que somos un país en vías de desarrollo", enfatizó.

Luego se llevó adelante el panel "Invitación a una agenda de alto impacto", donde participaron Daniel Funes de Rioja, presidente del B-20 de la Argentina, como moderador; Jorge Pablo Brito, presidente de la Asociación de Bancos Argentinos; Gustavo Weiss, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción; Daniel Pelegrina, presidente de la Sociedad Rural Argentina, y Miguel Acevedo, presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA).

Por orden alfabético, fue Acevedo quien comenzó la disertación: "Tengo una mirada optimista de la Argentina, donde podemos hablar maduramente sobre la industria 4.0. Justamente estoy sentado a lado del presidente de la Rural: ya no existe discutir industria vs. campo; es casi una antigüedad. Ahora hablamos de cadenas de producción, estamos ahí todos en conjunto. Todos tenemos que apoyar para poder exportar con mayor valor agregado", indicó.

Brito, en tanto, hizo un análisis del sector financiero: "La relación de préstamos con relación al PBI es muy baja. A mediados de los 90 era del 22%, uno de los más altos de la región. En el año 2001 bajamos al 9%. Ahora estamos en 12%. Esa relación está muy vinculada con el nivel de confianza y la estabilidad económica y financiera de nuestra moneda", sostuvo.

Y agregó: "No hay duda de que cuando uno habla del alto costo argentino -laboral, impositivo, logístico-, el costo financiero no es ajeno. Tiene que ver con el bajo nivel de ahorro de la Argentina. Luego del blanqueo de los fondos en negro del año pasado, desde los bancos todavía no pudimos lograr que esos ahorros en el exterior vuelvan a la Argentina, ya sea a través de inversión directa o en depósitos bancarios. Hay que seguir bajando el riesgo país, y que los argentinos de a poco empecemos a confiar en nuestra moneda".

Por su parte, Pelegrina señaló que para lograr competitividad en la producción de alimentos "es necesario trabajar en conjunto con el resto de los eslabones de la cadena productiva para lograr competitividad sistémica".

Inversión negativa

Finalmente, Weiss reveló que "la inversión en la Argentina, desde 1980 a la fecha -probablemente desde antes también, pero desde que se tienen estadísticas del Banco Central- es negativa porque la amortización del capital fue superior al incremento del capital".

Entre los empresarios que los escuchaban se encontraba Marcelo Figueiras, dueño de los laboratorios Richmond, que señaló que el objetivo del foro es "aportar ideas para posicionar a la Argentina en el mundo", y que el mundo vea que en el país "hay un clima pronegocios, proempresas, y que se pueden desarrollar las inversiones que todos estamos esperando".

También se encontraba Juan Napoli, presidente del Banco de Valores SA, que comentó que lo más importante del foro es el intercambio de ideas de diferentes sectores de la economía. "Los problemas principales pasan por la infraestructura, los riesgos de la seguridad digital y el tema educativo", enumeró.

Fernando Cinalli, presidente de Cinalli S+R, explicó que la reunión en Salta es la segunda que hace el B-20 local. "Esto forma parte de una movida empresaria que trata de presentar a la Argentina desde otro lugar en el mundo. La marca país es lo que nos une a todos; a los distintos sectores".