La producción industrial cayó en julio 1,2%, y la construcción creció 2,2%, según el Indec
La actividad fabril se vio muy afectada por el endurecimiento de las restricciones para importar insumos esenciales; las obras se recuperaron un poco luego de haber retrocedido en junio
Tal como se estimaba, debido al endurecimiento de las restricciones para importar insumos esenciales, la producción industrial cayó 1,2% desestacionalizado en julio, luego de crecer 2,6% en junio, y volvió a ratificar su comportamiento inestable en lo que va del año. En contraste, la construcción avanzó 2,2% desestacionalizado en el séptimo mes del año, después de haber retrocedido 1,8% en la medición anterior.
Ambas cifras fueron informadas por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), que publicó hoy el Índice de Producción Industrial Manufacturero (IPIM) y el Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC). “En julio de 2022, el índice de la serie desestacionalizada muestra una variación negativa de 1,2% respecto al mes anterior y el índice serie tendencia-ciclo registra una variación negativa de 0,4% respecto al mes anterior”, agregó el organismo oficial.
Como se dijo, el dato de junio del IPIM vuelve a evidenciar el comportamiento inestable que viene teniendo en todo 2022, en lo que los analistas describen como un “serrucho”. En efecto, en enero cayó 8,3%; en febrero creció 7,8%, en marzo volvió a retroceder 3,6%, en abril avanzó 2,9%, en mayo cayó 1,1%, en junio avanzó 2,6%, y en julio cayó 1,2%.
Camilo Tiscornia, director de C&T Asesores Económicos, comentó que lo de la industria era esperable, debido a que a fines de junio el Banco Central volvió a restringir el acceso de los importadores al mercado oficial de cambio. “Eso le complicó la vida a la importación y eso tenía que tener impacto en la actividad manufacturera que usa insumos del exterior. A eso hay que sumarle la turbulencia política, pero lo más determinante fueron las restricciones a las importaciones, que van a seguir condicionando y que seguramente en agosto también lo hicieron”, analizó el economista.
En tanto, Lorenzo Sigaut Gravina, economista de la consultora Equilibra, señaló que el IPI mostró una caída bastante significativa, con niveles de actividad que están por debajo de los de diciembre de 2021 y que en términos interanuales también se está desacelerando (5,1%, mientras que acumulaba 6% en el primer semestre). “Algo para destacar es que por primera vez tiene claro signo negativo el índice de tendencia ciclo, que toma las variaciones de los últimos meses y da indicios de que se inicia una etapa restrictiva en la industria”, opinó.
Agostina Myronec, economista de la consultora Ecolatina, dijo que era esperable que en julio se produjera una caída de la producción industrial, por las restricciones a las importaciones y la incertidumbre cambiaria. “De todas maneras, este dato podría haber sido peor, considerando que, por ejemplo, en octubre de 2021, cuando también aplicaron trabas a las importaciones, el índice llegó a caer 5,9% de manera mensual”, remarcó.
En lo que respecta a la construcción, Myronec destacó que mostró un desempeño más favorable en términos desestacionalizados pero también en su medición interanual. “Cuando se miran los insumos para la construcción, se ve que la mayor parte mostró crecimiento interanual positivo, exceptuando ladrillos huecos y asfalto (muy vinculado a la obra pública, que muestra un rezago respecto de año anterior, que fue electoral). En gran medida, la actividad se mantiene en terreno positivo, pese a un contexto de fuertes restricciones cambiarias e incertidumbre, que incentivan a volcar el ahorro hacia este sector”, concluyó.
Para Sigaut Gravina, el dato de julio en construcción es positivo, sobre todo después de una caída en junio. “En este caso, creo que la incertidumbre cambiaria puede haber impulsado un adelantamiento de compra de materiales, sobre todo cuando, producto del ensanchamiento de la brecha, quienes tienen dólares y quieren construir o hacer refacciones, pueden haber visto como conveniente hacer valer el peso de esa moneda y aprovechar el momento”, afirmó el economista.