La recaudación creció 40,4% en febrero y llegó a $330.890 millones
La recesión continúa afectando la recaudación del fisco donde todavía no se percibe una reactivación, aunque los economistas señalan que podría haber un piso. En febrero, los ingresos del Estado crecieron un 40,4% nominal con respecto al mismo mes de 2018, pero quedaron por debajo de la inflación interanual –de alrededor 50%– y en términos reales cayeron aproximadamente un 7%. Se trata así del cuarto mes consecutivo con caída real de esta magnitud, según señaló la consultora LCG.
El dato de recaudación es uno de las variables que el Gobierno más sigue de cerca este año, ya que a fin de 2019 debe lograr el equilibrio fiscal para cumplir con la meta acordada con el Fondo Monetario Internacional ( FMI). Para ello, el año pasado, el Ministerio de Hacienda amplió la base impositiva con la implementación de retenciones a todas las exportaciones.
Sin embargo, la caída del consumo y la devaluación impactaron en los menores ingresos que se obtuvieron en los últimos meses por la recaudación del IVA y de los derechos de importación.
En concreto, la AFIP indicó hoy que el mes pasado se recaudaron $330.890,7 millones, de los cuales $219.658 millones fueron a través de impuestos.
El IVA –el tributo vinculado a la actividad– creció apenas un 33,6% y aportó casi un tercio de lo recaudado, con $103.782 millones. Del total, $81.667 millones provienen del IVA impositivo, que creció 43,2%, y $24.165 millones, del IVA aduanero, con un alza nominal de apenas 8,9%, producto del derrumbe de las importaciones. La información que se divulga de este concepto es la del mes anterior; es decir, la de enero, donde la inflación interanual fue 49,3%, según el Indec.
Por el impuesto a la seguridad social, que está vinculado al empleo y a los salarios, se recaudaron $85.784 millones, lo que significa un alza nominal de 30,4%. "Este tributo está afectado por la menor creación de puestos de trabajo, la caída del salario real y el aumento del mínimo no imponible, que significa una baja de la base impositiva", explica el economista Gabriel Caamaño, de la consultora Ledesma.
La recaudación del impuesto a las ganancias, en tanto, tuvo un buen desempeño: aumentó 52,9% y se recaudaron $69.441 millones. "Ganancias es un impuesto devengado. Puede estar impactado por los anticipos, el cambio en las escalas, o por otros factores, pero no está vinculado a la actividad", señala Caamaño.
En lo que se refiere al tributo vinculado a los débitos y créditos (más conocido como el impuesto al cheque) se recaudaron $24.835 millones, lo que significa un alza del 47,3% con un día hábil menos que el mismo mes del año pasado. Sin embargo, en comparación con lo recaudado en enero, cuando el tributo le había ganado a la inflación, el mes pasado el ingreso por este impuesto tuvo un peor desempeño.
En cuanto a lo recaudado por retenciones, por su parte, aumentaron 111,3% y alcanzaron los $25.449 millones, favorecido por la suba del tipo de cambio y por la implementación de mayores impuestos a las exportaciones.
En el desagregado, la recaudación por el impuesto a las exportaciones aumentó 212,9% y trepó a $17.592 millones. Según la AFIP, los mayores ingresos están explicados "por la suba del tipo de cambio, el derecho de exportación adicional (sumó $11.363 millones) y a los servicios ($774 millones), y dos días hábiles más de recaudación".
"A pesar de la buena dinámica de la recaudación por derechos de exportación, seguimos aclarando que el rendimiento dista mucho de la proyectada inicialmente por Hacienda, que esperaba recaudar $430.000 millones por este concepto en todo el año", dijeron en LCG.
"Desde que se implementó el nuevo esquema de retenciones, la recaudación por derechos de exportación ronda los $ 15.000 millones mensuales. Corridos dos meses, para alcanzar la meta de Hacienda en los próximos 10 meses se debería recaudar $40.000 mensuales, 66% más que en estos meses. Aun con un aumento esperado de la cosecha del 30% anual, el objetivo parece ambicioso, –agregaron, y concluyeron–: Sin dudas, es una variable a monitorear dado que es el principal mecanismo con el cual se puede lograr la convergencia fiscal".
En tanto, los derechos de importación crecieron 22,3% y generaron ingresos por $7857 millones.
"La recaudación marca que sigue en deterioro la actividad, algo que seguro continuará hasta por lo menos el segundo trimestre. Esto se ve mucho más claro por el lado de la caída de las importaciones y por la menor magnitud interna de las transacciones, que impacta en el impuesto a los créditos y débitos y en el consumo de productos locales, con el IVA impositivo", analizó Caamaño.
Finalmente, en bienes personales el aumento fue del 78,7% y en el impuesto a los combustibles creció 43,1%.