La recesión pone en el freezer varios proyectos minoristas
Cines, shoppings y fondos de inversión redefinen sus estrategias para sobrevivir
Después de soportar más de tres años de recesión, las grandes cadenas minoristas parecían curadas de espanto y, a los golpes, habían aprendido a convivir con un mercado de ventas en baja. Sin embargo, las últimas medidas del Gobierno, que restringen el retiro de fondos de los bancos, obligó a la mayoría de las empresas a congelar sus planes de negocios a la espera de ver cómo los consumidores se adaptan a las nuevas reglas de juego.
"Todo el mundo está esperando a ver qué pasa y, mientras, congela sus proyectos. En todos lados me piden unos días más de plazo porque nadie se anima a concretar una operación", se lamentó Alejandro Ginevra, titular de la desarrolladora inmobiliaria Aranalfe. La firma inauguró el Devoto Shopping hace dos semanas, un día antes de que se desatara la corrida financiera que obligó a Cavallo a restringir el retiro de fondos bancarios.
Tarea difícil
El shopping debutó con 85% de los 110 locales alquilados y Ginevra confiaba en que la proximidad de las fiestas (que tradicionalmente son los días de mayor venta en el año) jugara en favor para encontrar los locatarios interesados en instalarse en el centro comercial de Devoto.
Sin embargo, el ejecutivo reconoce que la tarea no le está resultando nada fácil. "No nos podemos quejar porque a pesar de la crisis, el shopping está funcionado muy bien en materia de público, pero nos está resultando muy difícil completar los locales que tenemos disponibles". La incertidumbre que viven todos los argentinos también llevó a la cadena de cines Hoyts General Cinema a redefinir su plan de expansión en el mercado local. La firma que lidera el negocio de exhibición de películas en la Argentina con una participación de mercado de 34%, acaba de inaugurar un nuevo complejo de diez salas en Moreno, con una inversión de US$ 6,5 millones. Pero todavía no tienen definido cuáles serán sus próximos pasos en 2002.
"Tenemos cinco proyectos en carpeta, pero hoy están todos stand-by a la espera de ver que pasa con la economía", reconoce Delfín Fernández, director para América del Sur de Hoyts General Cinema. La cadena tiene cerrado un contrato para montar un multicine en San Miguel de Tucumán y otros cuatro preacuerdos para instalarse en Puerto Madero y las ciudades de San Juan, Córdoba y Rosario. En todos los casos, los cines de Hoyts formarán parte de centros comerciales que todavía no tienen fecha para el inicio de obras.
A los problemas propios de cualquier negocio minorista, en el caso de Hoyts -una compañía de capitales australianos y norteamericanos- se suman los eventuales problemas que podría tener la empresa para girar al exterior sus dividendos. "Hasta ahora llevamos invertidos US$ 70 millones en el país y no está en los planes el envío de fondos a nuestra casa matriz, aunque no podemos dejar de ver el tema como una preocupación a futuro", explica Fernández.
El efecto freezer también llevó al fondo de inversión Condor Ventures a poner un compás de espera. La empresa que preside Pablo Di Paola era una de las pocas que se habían mostrado activas en los últimos meses e incluso cerró la compra de la licencia para la Argentina de la cadena de disquerías Tower Records. Sin embargo, ahora están un poco más conservadores. "Analizamos varios rubros minoristas para invertir, pero postergamos algunos proyectos porque son negocios muy sensibles a la disponibilidad de gasto de la gente", explica Di Paola.