La venta de inmuebles con crédito hipotecario cayó 60% interanual en agosto
La devaluación y la inflación siguen impactando en el mercado; la cantidad total de escrituras cayó 24,5% interanual
La compraventa de inmuebles en la ciudad de Buenos Aires cayó en agosto por tercer mes consecutivo. Y fue la baja interanual más fuerte del año. Según el habitual informe del Colegio de Escribanos porteño, se realizaron 4549 escrituras, contra las 6027 de igual mes del año pasado, lo que implica un retroceso del 24,5%.
En tanto, las operaciones con crédito hipotecario sufrieron el mayor golpe, con una caída del 60% (639 escrituras en agosto pasado, contra 1605 el mismo mes del año anterior). Consultado por la nacion, el presidente de Reporte Inmobiliario, José Rozados, dijo que la participación del crédito es cada vez menor, lo que explica las caídas más profundas en la cantidad de escrituraciones respecto de meses del año pasado que habían sido muy buenos en operaciones apalancadas con préstamos. "Antes, mes a mes, la tasa de crecimiento de operaciones con hipoteca superaba holgadamente el aumento de las escrituras; ahora se está dando el fenómeno inverso", señaló. "Como preveíamos, el impacto de la devaluación en los precios de los inmuebles iba a generar una drástica reducción en la cantidad de tomadores de créditos ante la imposibilidad de calificar con sus ingresos en el segundo semestre del año", agregó.
En la comparación del acumulado de los primeros ocho meses del año se observó un crecimiento del 9,4% respecto del mismo período de 2017: 40.030 escrituras, contra 36.605. Pero las perspectivas no son las mejores en el corto plazo, si se toma en cuenta que el dólar promedio de agosto dio $30,91, mientras que en septiembre estaría cerca de los $38.
Mercado dividido
El presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, Alejandro Bennazar, explicó que el mercado inmobiliario hoy se divide en dos grandes grupos: las personas que buscan comprar un inmueble mediante un crédito hipotecario y aquellas que tienen dinero disponible para comprar al contado. "Con respecto a las líneas de crédito hipotecario, están planchadas, y el que tiene el dinero en mano todavía sigue en marcha y se anima a plantear contraofertas", analizó Bennazar.
El titular de la Cámara consideró que la leve suba intermensual que se observó en agosto surge de la actividad de los tomadores de créditos. "Hay un descenso de venta a partir de abril, mayo y junio. Eso se refleja 120 días después, aproximadamente, y lo que se ve hoy puede ser efecto de mayo, cuando la mayor cantidad de los compradores se apresuró a poder calzar el crédito", dijo.
Según los especialistas, con la suba del dólar cambiaron las condiciones para acceder a un préstamo hipotecario, dejando afuera a un gran número de personas. De hecho, las últimas cifras de Reporte Inmobiliario calculan que para un préstamo que cubra el 80% del costo de la propiedad en el Banco Nación, en mayo de 2017, cuando se produjo el boom de la toma de créditos y el tipo de cambio aproximado era de $16,30, se necesitaban $1.369.200 para comprar una propiedad de dos ambientes promedio en la Capital Federal (unos US$105.000).
En cambio, con un dólar promedio de $39, el costo de las propiedades avanzó a US$115.000, lo cual representó $4.485.000 en pesos. Esto significó un aumento del 162,05% en moneda local. Además, la cuota inicial en mayo de 2017 era de $6540 y ahora ronda los $22.916. En tanto, el ingreso necesario por familia para acceder al préstamo era de $25.884 en mayo del año pasado y ahora subió a $90.721.