Otro cargo que engrosa las boletas: las tasas municipales
El monto final de la factura de gas que cada mes es pasada por debajo de la puerta del consumidor no solo está engrosado por la inclusión (discutible) del impuesto a los débitos y créditos bancarios, sino que además incluye otros cargos muy poco amigables: las tasas y los impuestos municipales, algo que fue autorizado por el propio Enargas.
Es bien sabido que una de las formas más fáciles de hacer efectivo el cobro de un impuesto es mediante su inclusión en la boleta de un servicio público, puesto que esta no puede ser dejada sin pagar por el usuario, ya que se le cortaría el suministro (en este caso, del gas). En efecto, el Enargas dictó el año pasado la resolución 6/2018, por la cual estableció los mecanismos de percepción que deben utilizar las distribuidoras de gas natural de todo el país para descargar en las facturas de los usuarios las tasas y los tributos municipales que pagan en cada jurisdicción.
El tributarista César Litvin comenta que además de que se traslada al consumidor un impuesto no trasladable, como el tributo al cheque, el usuario debe soportar que se le incluyan en la factura una cantidad de impuestos municipales. "Por ejemplo, en muchas comunas se agrega una tasa municipal que es de 2,5% y de la que no se sabe qué brinda como contrapartida el municipio. ¿Qué servicio prestan para justificar esa tasa?", se pregunta el especialista.
Varias asociaciones de defensa del consumidor pusieron el grito en el cielo. Una de ellas es Deuco, presidida por Pedro Bussetti, que en su página web manifiesta: "Deuco rechaza enérgicamente este nuevo castigo a los usuarios de gas natural de todo el país, impuesto por el ministro de Energía y el Enargas, obligando al pago de tasas y tributos municipales que son propios de la actividad empresarial que desarrollan las distribuidoras de gas y que por lo tanto deben asumir dentro de los costos que luego se trasladan a las tarifas".
Por su parte, Claudio Boada, director de la Asociación de Usuarios y Consumidores, expresó: "En tiempos en que los servicios públicos inciden 11% en el ingreso de una persona (y la proyección para fin de año es del 13%, según un informe del Centro de Investigación y Formación), es interesante ver cómo está compuesto el precio final de la factura".