Pagarán retroactivos de jubilaciones en cuotas

Presionado por las restricciones fiscales, el Gobierno prorrogó la vigencia de un mecanismo que ordena diferir el cumplimiento de obligaciones con los jubilados y pensionados, con el objetivo de achicar las erogaciones de la Anses. De esta manera, se resolvió repetir una práctica que había dispuesto la gestión delarruista y que, según habían estimado los funcionarios de aquel momento, podría dejar un "ahorro" anual de hasta $ 200 millones.

Concretamente, el decreto 178, publicado el viernes último en el Boletín Oficial, dispone prorrogar por un año la disposición sobre el pago en cuotas de los retroactivos que le corresponden a una persona en el momento en que se le autoriza un beneficio provisional.

Se trata de una medida que rigió para todos los haberes habilitados entre mayo y diciembre del año último, según lo que se había dispuesto en el decreto 449 de abril de 2001. En ese entonces se había previsto un ahorro anual de $ 100 millones, pero luego quienes dirigían la Anses admitieron que el diferimiento podía alcanzar, en un año, hasta los $ 200 millones. De esa manera, el mecanismo se convirtió en uno de los que permitió un mayor ahorro -no genuino- de recursos en el sistema previsional.

La diferencia es que quienes se jubilaban o pensionaban hasta abril del año pasado cobraban, junto a su primer haber, la suma correspondiente a los pagos por el período que va entre el día en que se comienzan los trámites y el momento en que la Anses habilita los pagos. La nueva norma hace que ese dinero se reciba en doce cuotas mensuales.

Sentencias dormidas

Más allá del alivio que les puede aportar ese diferimiento a las cuentas de la Anses, el equipo del ministro de Trabajo, Alfredo Atanasof, se siente entre la espada y la pared por la enorme cantidad de sentencias judiciales en favor de jubilados -se estiman unas 30.000- que están pendientes de pago.

La gravedad del problema se refleja en que, si bien para el año pasado estaba presupuestado el pago de $ 769,7 millones por ese concepto ($ 272,8 millones en efectivo y $ 496,9 millones en bonos), en la práctica el Ministerio de Economía giró apenas unos $ 20 millones.

Y, para colmo de males, lo poco que se pagó estuvo afectado con el recorte del 13% que se impuso a todos los salarios públicos y a las jubilaciones superiores a los 500 pesos.

Una de las alternativas para resolver al menos parcialmente el problema sería desdoblar el pago de las obligaciones. El mecanismo implicaría actualizar los haberes según el monto del fallo, pero dejar de lado los montos retroactivos del resarcimiento.

Sin embargo, para decidir los pasos por seguir, la cartera laboral deberá esperar qué consideración se les dará a los juicios de la Anses en el presupuesto 2002, que Economía giraría al Congreso tan sólo a comienzos de la semana próxima.

Las principales causas por las que el organismo previsional enfrenta demandas son la determinación del haber inicial, la movilidad o actualización, la vigencia de topes y la falta de ejecución de sentencias.