Perspectivas
TRIGO
El grano local ha dejado de ser competitivo
- "A diferencia de lo sucedido en 2001, los precios FOB del trigo argentino no son competitivos para efectuar negocios fuera del Mercosur y se encuentran a la par del trigo estadounidense para ingresar a Brasil. Con la cotización FOB en el Golfo de México, de US$ 138 por tonelada, el cereal de EE.UU. puede entrar en el mercado brasileño a US$ 173, es decir con un valor similar al que arribaría a los puertos brasileños el trigo argentino, a partir del precio FOB de US$ 160 por tonelada vigente en los puertos del sur y computando el Arancel Externo Común", informó la firma Granos del Paraná SA.
Esta corredora agregó que la falta de competitividad se puede agravar si disminuyen los precios del trigo estadounidense, como consecuencia del ingreso de la cosecha de invierno en aquel país, que ya avanzó al 35% del área sembrada. "Las condiciones del mercado nos muestran que con un ingreso normal de la producción de trigo en el hemisferio norte y en Brasil, no debe descartarse que la demanda externa continúe baja y que los precios en dólares, en el plano local, no encuentren el sostén adecuado. Un indicador a seguir durante el próximo mes es la evolución de los compromisos externos y en consecuencia el saldo exportable. También debemos recordar que el trigo es un bien "político", por lo cual no se puede descartar una intervención oficial tendiente a contener subas de precios desmesuradas en pesos", destacó Granos del Paraná.
MAIZ
Siguen retrasadas las ventas argentinas
- Según el reporte sobre compromisos externo de maíz, difundido ayer por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, en la presente semana sólo se exportaron 25.000 toneladas de maíz -adquiridas por Portugal-, que suman un volumen total comercializado de 5,85 millones de toneladas, muy por debajo de los 7,60 mill./t negociados el año anterior para esta misma fecha. Los analistas coinciden en que las escasas ventas obedecen, en parte, a la retención de granos que ejercen los productores por la gran incertidumbre económica que domina la escena local. Esta actitud eleva los precios FOB, lo que resta competitividad al producto argentino.