Pese al apoyo del Banco Central y la Anses, el superávit cayó 70,8%
Si no se contabilizara esa ayuda, el Tesoro habría tenido un déficit primario de $ 3032 millones; el gasto primario aumentó 36% interanual
Pese al contundente apoyo del Banco Central al Tesoro, el superávit fiscal primario se desplomó 70,8% en febrero frente al mismo mes del año pasado, debido al crecimiento del 36% del gasto primario frente al promedio de 29% en que se había expandido el gasto en 2012. Esta situación, según los analistas, presiona más sobre la inflación y acelera las expectativas de devaluación del tipo de cambio que el Gobierno pretende reprimir.
Con más de un mes de demora, una vez más, el Ministerio de Economía difundió anteayer el resultado de las cuentas públicas, que presentaron un superávit primario de $ 204 millones, frente a los $ 698,4 millones del mismo mes de 2012.
Pero este ahorro se transforma en un déficit profundo si se le descuentan los $ 3235,6 millones que recibió el Tesoro por aportes por rentas de la propiedad, básicamente por $ 2248,1 millones del Banco Central y $ 689,9 millones de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), más $ 95 millones del PAMI. La importante ayuda resalta más si se la compara con los $ 238,8 millones recibidos por el Tesoro hace un año, con 50 millones del BCRA, 93 millones de la Anses y 73 millones del PAMI.
Si se le descontara al resultado primario la enorme ayuda de estos organismos, el Tesoro habría registrado un déficit mayor a los 3000 millones de pesos en el segundo mes de este año, según las planillas de la Secretaría de Hacienda.
A diferencia del mes previo, cuando el superávit primario había exhibido una mejora genuina de 31% frente a enero del año pasado, el resultado primario volvió a presentar una tendencia procíclica, con una importante brecha entre el crecimiento de los gastos y los ingresos.
De hecho, mientras que en 2012 el promedio de aumento fue de 29% y en enero, de 24%, en febrero saltó hasta el 36%, básicamente, según los analistas Nicolás Bridger (Prefinex) y Maximiliano Castillo (ACM), por el incremento de los subsidios al sector privado. "Este fue el aumento más importante de los últimos 12 meses en el gasto primario", subrayó el director de ACM a la nacion.
Por su parte, Bridger detalló que "en enero último, el gasto había crecido en línea con los ingresos (neto de transferencias de la Anses y el BCRA): 25,4 por ciento versus 25,7 por ciento%, respectivamente; en cambio, en febrero los incrementos fueron de 36,6 y 26,4 por ciento, respectivamente".
También explicó que, sin el aporte del BCRA y la Anses, "el resultado primario hubiera sido deficitario en 3032 millones de pesos".
El desequilibrio se produjo "fundamentalmente por las transferencias al sector privado, que mostraron un incremento del 40 por ciento interanual", agregó Bridger.
En este plano, Hacienda informó que, si bien por un lado aumentaron las partidas para "la asignación universal por hijo y las demás asignaciones familiares, como también el aumento de las coberturas asistenciales administradas por el PAMI", que se ubican por debajo de la inflación real, a la vez también aumentaron "las compensaciones y subsidios a usuarios de servicios públicos (transporte y energía)".
Al respecto, Castillo opinó que "el resultado de febrero confirma, una vez más, que no hay ningún tipo de moderación en la dinámica de la política fiscal, esquema que seguirá condicionando la ejecución de la política monetaria y, con ello, será difícil, sino imposible, moderar las crecientes expectativas de devaluación", reflejadas en la fuerte brecha entre el tipo de cambio oficial y el paralelo, cercana al 80 por ciento.
Por eso, Bridger consideró que si se mantuviera "la divergencia en las tasas de crecimiento del gasto primario y de los ingresos, la emisión monetaria seguirá siendo una fuente de financiamiento significativo, lo cual se traducirá en presiones inflacionarias y alimentará la demanda del dólar paralelo", pese a que, en el discurso del BCRA, la emisión acompaña el alza de la demanda.
Aval de Cristina a Lorenzino
La presidenta Cristina Kirchner expresó, con tono de broma, su aval al ministro de Economía, Hernán Lorenzino, tras su gaffe en una entrevista con la TV griega, en la que dijo: "Me quiero ir", cuando le preguntaron por la inflación. "Ven? No se quiere ir", dijo la Presidenta anteayer, cuando Lorenzino firmó en un acto un plan para financiar obra pública.