Roces en el Gobierno por nuevos despidos en el Indec

El desplazamiento de al menos 13 técnicos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en los últimos dos días causó "discordia" en el seno del Gobierno, pudo saber LA NACION de fuentes oficiales. La decisión de la cúpula del Indec, que responde al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, provocó un fuerte malestar en el Ministerio de Economía porque va en contra del acuerdo firmado por esa dependencia y la jefatura de Gabinete con el gremio ATE-Indec para normalizar el organismo.

La iniciativa, que según afirmaron las fuentes podría revertirse la semana próxima, generó un duro rechazo de los trabajadores, que ayer realizaron una protesta en la puerta del organismo para reclamar la reincorporación de los técnicos desplazados -nueve anteayer y cuatro más, al menos, ayer-, y convocó para pasado mañana a un plenario de ATE-Capital.

Según trascendió, parte del malestar del Palacio de Hacienda se debe a que la medida va en contra del espíritu y la letra del pacto firmado en agosto entre ATE y el Gobierno, con el que se buscó poner fin, dos meses antes de las elecciones, a las protestas en el Indec.

El primer artículo de ese acuerdo dejaba sin efecto "las medidas disciplinarias" adoptadas desde el 11 de julio, cuando se inició el conflicto con los trabajadores. Incluía tanto al personal del Indec como a los contratados. El tercer punto creaba una comisión integrada por representantes de la jefatura de Gabinete -el subsecretario de Gestión Pública, Juan Manuel Abal Medina-, el Ministerio de Economía -subsecretario de Coordinación Económica, Héctor Osvaldo Alonso-, los trabajadores agrupados en ATE -Leopoldo González y el delegado en el Indec, Daniel Fazio-, y Cynthia Pok, por los técnicos del organismo. Esa comisión debía monitorear el cumplimiento del acuerdo hasta fines de este mes.

Tras la firma del convenio, esa comisión decidió trasladar a la directora de Precios al Consumidor, Beatriz Paglieri, a la Comisión Nacional de Comercio Exterior. Pero el traslado de la protegida de Moreno, cuya intromisión en el Indec es el eje sobre el que gira la polémica en torno de las estadísticas oficiales, espera aún la firma del presidente Néstor Kirchner.

La cúpula del Indec, que conduce Ana María Edwin, cercana a Moreno, parece haber debilitado el monitoreo de la comisión que encabezan Alonso y Abal Medina, según reconocen otras fuentes oficiales. Las autoridades del Indec se mantuvieron en silencio durante casi todo el día y el área de prensa no respondió la consulta de LA NACION. Sin embargo, casi a las 10 de la noche de ayer, mediante un comunicado difundido por la agencia oficial Télam, el organismo justificó las desvinculaciones: "Al 31 de octubre vencieron los contratos de 153 personas. De dicho total, en el marco de las tareas programadas por el Instituto, resultaba innecesaria la renovación de 13 contratos. Este tipo de contratación es por tiempo determinado".

Si bien las fuentes reconocen que se abrió un nuevo contrapunto dentro del Gobierno, buscaron desligar el hecho de otros que alimentaron la disputa entre Fernández y el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido. "Cada cosa que hace Moreno no es siempre por orden de De Vido", sostuvieron. Los desplazamientos, que para ATE son despidos, pero que en la Casa Rosada consideraron como una situación común en el Estado, afectaron a cinco técnicos que trabajaban en la encuesta permanente de hogares (EPH) y a ocho que se desempeñaban en el índice de precios al consumidor (IPC). Tanto en el Gobierno como en ATE indicaron que una persona cesanteada fue reincorporada ayer. "Este es un indicio de que podrían dar marcha atrás con los despidos", dijo uno de los delegados de ATE, Raúl Llaneza, aunque aclaró que la lista de desplazados podría ser mayor.

Ayer, una de las técnicas desplazadas habló con la prensa. "No dieron razones. Pero las nueve personas hemos parado, participamos de asambleas, dos somos testigos en la causa contra [la directora de Precios al Consumidor, Beatriz] Paglieri y [el secretario de Comercio Interior, Guillermo] Moreno, ocho pertenecíamos a la Dirección de Precios al Consumidor y la restante a la Encuesta Permanente de Hogares", precisó a Radio Continental Gabriela Soroka, que ingresó en el Indec en 2005. "Hace nueve meses que vienen manipulando la información, borrando, presionando, usando métodos muy particulares desde darle dinero a la gente o enviar personas armadas", denunció.

Según señaló la agencia DyN, Pok dio más indicios sobre los cambios en la medición del IPC: las prepagas, los colegios privados, los restaurantes y el turismo no entrarían en la nueva medición. La explicación es que "la mayoría de la población no tiene prepaga, no manda a sus chicos a colegios privados, no cena en restaurantes y si va de turismo usa la hotelería de la obra social".