Se suspendería la exportación de algunos cortes cárnicos

En plena disputa por el precio de la carne, en las últimas horas el Gobierno volvió a autorizar algunos embarques. Lo hizo por cortes de calidad de exportación y negocios por menudencias. Sin embargo, pese a esos movimientos, ayer el mercado volvió a ser un hervidero de versiones. Entre las que más se escucharon, una sobresalió. Es la que afirma que mañana, cuando el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, reúna en su despacho a frigoríficos e integrantes de la cadena cárnica, el Gobierno avanzaría hacia una suspensión selectiva de las exportaciones. Esto hasta que se registre una baja de los precios o pasen las fiestas de fines de año, de mucho consumo.

Según trascendió, la medida que adoptaría el Gobierno guardaría relación con la aprobación de los embarques de las últimas horas. En este sentido, la mayoría de los cortes enfriados, de mayor calidad, la cuota Hilton -el cupo de 28.000 toneladas con destino a la Unión Europea con ventajas arancelarias- y las menudencias, que tienen poco impacto en el mercado interno, se podrían seguir exportando sin inconvenientes. En cambio, los cortes congelados, de menor calidad, sufrirían una suspensión transitoria de las ventas al exterior. En este grupo también se llegaría a incluir termoprocesados que se elaboran con animales que ya cumplieron su ciclo productivo. "Hoy [por ayer] el comentario es que va a haber una suspensión con esas excepciones", señaló un industrial exportador.

Según datos del Servicio de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), en los diez primeros meses de 2009 las exportaciones de carne vacuna fresca acumularon 318.060 toneladas por 1252 millones de dólares, superior en un 62% a la registrada en el mismo período de 2008 en volumen y del 6% en precio. El alza estuvo impulsada por cortes no Hilton y congelados que ahora se suspenderían.

Por el lado de la Hilton, se colocaron 19 mil toneladas. Además, se exportaron 127.102 toneladas de menudencias y 31.631 toneladas de termoprocesados. A nivel país, Rusia importó cortes frescos bovinos argentinos por un volumen de 117.270 toneladas, equivalente al 39% de las ventas totales. En principio, de cumplirse la suspensión que aplicaría el Gobierno, Rusia sería uno de los destinos más afectados.

Polémica

En este contexto, ayer más de un actor de la cadena cárnica hacía sus propias proyecciones sobre qué va a ocurrir con la carne. "Va a seguir aumentando; por ahí aumenta un centavo más la próxima semana y después se estabiliza", dijo Miguel Schiariti, presidente de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra). Al margen de este pronóstico, para Schiariti hacia "el 2 de enero [el precio de la carne] se va a aquietar porque va a pasar el aumento de demanda que implican las fiestas", señaló. Para Schiariti en este momento no habría cierre de exportaciones.

En su óptica, el problema va a estar en abril/mayo del próximo año, cuando por efecto de la sequía y la liquidación de vientres falten entre 3 y 4 millones de terneros. En total, en carne se daría un bache de unas 800 mil toneladas.

Ayer, otra versión dio cuenta de que la Argentina había aumentado la importación de asados que suele hacer desde Uruguay. Pero en la industria desestimaron ese rumor.

En medio de la pelea, Alberto Williams, vicepresidente de la Asociación de Propietarios de Carnicerías de la Capital Federal, le apuntó a los productores. "Tendríamos que terminar bien el año porque veníamos bien, pero el sector de la producción comenzó a decir que iba a faltar carne, y entonces vino esta suba", dijo Williams a radio El Mundo.

En un comunicado, la Sociedad Rural Argentina (SRA) advirtió que por el intervencionismo del Gobierno el productor tiene cada vez menos participación en el valor final de la carne. Según la entidad, pasó de un 30 a un 22% en los últimos cuatro años, "quedando cada vez más dinero en los eslabones de la cadena comercial".