Segundo trimestre. La cuenta corriente arrojó un superávit de US$2824 millones

La caída en las importaciones producto de la recesión, la suspensión del turismo internacional tras la cuarentena dispuesta para frenar la expansión del coronavirus y un menor pago de intereses de deuda fueron tres de los factores que explicaron que la Argentina concluyera con superávit de cuenta corriente en el segundo trimestre de 2020. Según datos del Indec, la balanza de pagos en el período arrojó un saldo positivo de US$2824 millones.

Este indicador, que refleja todo el intercambio de bienes y servicios de la Argentina con el exterior, suele ser un factor vinculado al tipo de cambio. Habitualmente, cuando el peso está apreciado, la balanza de pagos es deficitaria, puesto que se vuelven más accesibles los bienes y servicios del exterior, como el turismo.

En su informe "Balanza de pagos, posición internacional y deuda externa del segundo trimestre de 2020", el Indec registró un superávit de US$2828 millones, que lleva al acumulado del semestre a un saldo positivo de US$3076 millones.

En cambio, en el segundo trimestre de 2019, el saldo había arrojado un déficit de US$1941 millones.

Según el organismo, la balanza comercial entre abril y junio de 2020 fue superavitaria en US$5274 millones, producto de US$14197 millones en exportaciones (cayeron US$2427 millones en forma interanual, un 14,6%) y US$8923 millones de importaciones (se contrajeron US$3484 millones, un 39%).

China, Brasil, Vietnam y Estados Unidos fueron los principales destinos de las exportaciones argentinas. Al mismo tiempo, China, Brasil, Estados Unidos y Paraguay fueron los principales abastecedores de importaciones, y representaron en conjunto el 53% de las compras argentinas de bienes en el exterior.

En cuanto a los servicios, la paralización del turismo internacional, dispuesto tras el cierre de las fronteras y la cuarentena que comenzó el 20 de marzo, contribuyó al ajuste en el déficit de la cuenta de servicios, que pasó de US$1375 millones en el segundo trimestre de 2019 a US$303 millones este año. Según el Indec, esta reducción se debe al ajuste en los déficit de viajes (US$654 millones) y transporte (US$432 millones).

En conjunto, el comercio de bienes y servicios de todos los rubros tuvo en el período una contracción del 47%. "Las limitaciones a la circulación internacional afectaron fuertemente las cuentas directamente relacionadas con el turismo internacional (viajes y transporte de pasajeros), en contraste con el transporte de carga, que continuó funcionando con limitaciones", dice el informe del Indec.

Por otro lado, dentro del segmento de inversiones de cartera, el Indec registró una caída del 40% interanual en los pagos de intereses, que cayeron a US$1682 millones. Esta baja explica el 40% del ajuste en el saldo de la balanza de pagos.

Según estimaciones de la consultora LCG, el superávit de cuenta corriente del segundo trimestre de 2020 representó el 0,8% del PBI, la marca más alta en once años. "Este resultado se da por una combinación en la caída del PBI medido en dólares y los altos registros en el balance de bienes A esto se suma un déficit históricamente bajo en la cuenta de servicios, explicado en gran medida por un contexto de pandemia que afectó fundamentalmente al turismo", concluyó el informe.