Sugestiva reunión de Kirchner con Pignanelli
A pocas horas de la crisis abierta por los dichos del titular del Banco Central (BCRA), Alfonso Prat-Gay, que descalificó la idea de tratar de fijar el valor del dólar en el marco de una política de libre flotación, el presidente Néstor Kirchner se entrevistó ayer con el antecesor de Prat-Gay en el cargo, Aldo Pignanelli, lo que levantó toda clase de suspicacias en la city.
En tanto, al ser consultado sobre los dichos de Prat-Gay, otro ex presidente del BCRA, Mario Blejer, dijo que si bien la política monetaria "la debe instrumentar el BCRA", su puesta en marcha "es una decisión del Gobierno". Para Blejer, los malentendidos se producen porque "tuvimos un régimen de convertibilidad que permitía al presidente y al gobierno determinar la regla". La reunión entre Kirchner y Pignanelli (de aceitados contactos en el justicialismo) había sido pactada hace unos días, "por lo que nada tenía que ver con lo que pasó ahora", explicaron ayer en Casa de Gobierno.
Sin embargo, por largas horas no pudieron evitar que el encuentro fuera interpretado como una secuela directa de la crisis abierta anteayer por los inesperados dichos de Prat-Gay. Incluso se llegó a especular que Kirchner habría sondeado los ánimos de Pignanelli para un probable recambio en el Central, algo enfáticamente desmentido por allegados al ex titular del BCRA. "Cruzaron impresiones sobre la mejor forma de superar el conflicto, pero no fue el tema central del encuentro", concedieron en su cercanía, porque Pignanelli rehusó el contacto con LA NACION.
Otras fuentes refirieron que la visita había sido diseñada para que Kirchner se asesorara sobre la mejor forma de impulsar dos recambios en el directorio del BCRA y sondear nombres. En la noche del martes, el Ejecutivo ordenó retirar del Senado los pliegos de Rafael Iniesta y Ricardo Ferreiro, quienes desde hace más de un año se desempeñan como directores del BCRA, "en comisión". Es decir, lo ejercen aunque no tienen la ratificación formal de la Comisión de Acuerdos de la Cámara alta.
El trámite busca allanar el camino para que el nuevo gobierno pueda sentar dos directores de su agrado en el Central, donde sólo tienen ratificación parlamentaria los nombramientos de Prat-Gay; del vicepresidente segundo, Ricardo Branda; del superintendente de Bancos, Jorge Levy, y de los directores Guillermo Lesniewier y Augusto Magliano. Los restantes tres miembros actuales (Víctor Bescós y Félix Camarasa, que responden al ministro Lavagna, y Pedro Lacoste, el vicepresidenteque desembarcó con Prat-Gay) tampoco cuentan con aval del Senado.
Sin embargo, no trascendieron los nombres que estaría pensando Kirchner para ocupar las vacantes que se buscan abrir.