Un nuevo impuesto municipal

El Senado convirtió en ley, ayer, el reconocimiento a las municipalidades y comunas de todo el país del derecho a cobrar un impuesto de hasta el 2% en concepto de "uso del espacio público" de sus distritos.

La medida afecta particularmente a las empresas de telefonía y de televisión por cable, ya que permite imponer un derecho por el uso diferencial del espacio aéreo y terrestre.

La iniciativa generó un áspero debate que inesperadamente se extendió por más de tres horas, en el que no faltaron menciones críticas a las sospechas de corrupción que pesan sobre el Senado y hasta un duro enfrentamiento entre el riojano Jorge Yoma (PJ) con el presidente de su bloque, José Luis Gioja (San Juan), y el titular provisional del cuerpo, Mario Losada (UCR-Misiones).

Es que la iniciativa nació por la presión de la Federación Argentina de Municipalidades (FAM), cuyos miembros ocuparon las barras del recinto para apoyar la sanción definitiva del proyecto, aprobado por la Cámara de Diputados en los primeros días de mayo último.

Sin embargo, varios senadores plantearon sus cuestionamiento, en muchos casos fiel reflejo de las objeciones planteadas por el Poder Ejecutivo, que podría vetar la ley, tal como lo adelantó el peronista neuquino Daniel Baúm. Así, se dio el curioso caso de que el miembro informante de la iniciativa, el titular de la comisión de Comunicaciones, Eduardo Angeloz (UCR-Córdoba), anunciara su voto positivo, pero en un largo discurso con fuertes cuestionamientos, como cuando destacó que "aquellos municipios que se verán beneficiados son los que concentran la mayor cantidad de residentes".

Y citó cifras claras de esta ventaja. Dijo que "Buenos Aires recaudará unos 38 millones de pesos con esta tasa, mientras que la comuna de Fiambalá (Catamarca) apenas si percibirá 586 pesos por mes".

Otras voces críticas destacaron que el costo de la tasa será trasladado a los usuarios, como el riojano Yoma. "Estamos votando un nuevo impuesto en medio del agobio que sufren las economías familiares, y además estamos aumentando las tarifas", protestó. Por último, Baúm fracasó en su intento por introducir una modificación que le permitiera a las cooperativas utilizar el impuesto como crédito fiscal.