El atacante de Bélgica estaba ligado al terrorismo y había matado a un hombre el día anterior

BRUSELAS.- Ayer, un hombre abrió fuego contra un grupo de personas en Lieja, ciudad de Bélgica situada a unos 40 kilómetros de la frontera con Alemania , y asesinó a tres personas, entre ellas dos policías. Hoy, los investigadores intentan dar con las razones que llevaron al agresor, identificado como Benjamin Herman, un delincuente que se habría radicalizado en prisión, a matar.

"La radicalización puede ser un motivo, pero también puede ser la falta de perspectivas en nuestra sociedad, porque también cometió un asesinato la noche anterior", dijo hoy el ministro del Interior, Jan Jambon, en declaraciones radiales.

Para el ministro del Interior, "la psicología de este individuo -quizás también estuviera drogado- plantea muchas preguntas. Antes de sacar conclusiones, debemos esperar el resultado de la investigación", agregó.

Las autoridades también confirmaron que el agresor, que había sido condenado en el pasado por robos, lesiones y tráfico de drogas, había matado el lunes a un hombre de 30 años en su domicilio de On. Según medios locales, el fallecido era toxicómano y recibió martillazos.

La hipótesis de un ataque terrorista también se mantiene por el momento. La fiscalía federal belga, encargada de los casos de terrorismo, se hizo cargo de la investigación, "ya que existen elementos que van en la dirección de un atentado terrorista", según su portavoz, Eric Van Der Sypt. Herman estaba fichado por sus contactos con islamistas radicales y se habría radicalizado a lo largo de sus estancias en prisión. Por su parte, la jueza federal Wenke Roggen dijo que el ataque estaba considerado como un "asesinato terrorista".

De hecho, un video aficionado muestra al autor gritando "Allahu Akbar" (Alá es grande) mientras camina y otro también muestra que el asaltante grita "Allahu Akbar" al tiempo que ataca a los agentes.

El incidente tuvo lugar ayer por la mañana, en una gran arteria del centro de Lieja, ciudad situada a unos 40 kilómetros de la frontera alemana, y terminaron con la muerte del agresor a manos de la policía tras tomar brevemente como rehén a la empleada de una escuela cercana.

El ataque

Ayer a las 10.30, Benjamin Herman "armado con un arma blanca", agredió por detrás a dos agentes, a quienes hirió con "varias cuchilladas" y tomó "sus armas de servicio", explicó el fiscal belga Philippe Dulieu.

Tras robar a los agentes las armas de fuego, disparó y mató a ambas oficiales, así como a un joven de 22 años que ocupaba el asiento de copiloto de un vehículo estacionado en las inmediaciones.

A continuación, ingresó en la escuela Léonie de Waha, "donde tomó como rehén a una trabajadora". Minutos después, policías lo abatieron cuando salió de este centro educativo disparando contra los oficiales.

Las víctimas

Las dos agentes fallecidas tenían 45 y 53 años. La más joven, madre de dos gemelas de 13 años, entró en la Policía en 1994, mientras que la segunda trabajaba en Lieja desde 2010 y tenía un hijo de 25 años. La tercera víctima estaba a punto de obtener su diploma de maestro.

Bélgica fue blanco de un doble atentado terrorista reivindicado por la organización jihadista Estado Islámico en marzo de 2016, en el que perdieron la vida 32 personas en el metro y el aeropuerto de Bruselas.

El último ataque considerado como "terrorista" se produjo en agosto, cuando un hombre de 30 años de origen somalí atacó con un cuchillo a dos soldados al grito de "Allahu Akbar" en el centro de Bruselas.

Agencias DPA y AFP