Canadá se convierte en el segundo país en legalizar la marihuana: cómo funciona su sistema

TORONTO.- 30 gramos. Ese es ahora el límite legal luego de que después de casi un siglo de prohibición, Canadá se convirtiera hoy en el segundo país del mundo en legalizar la marihuana recreativa, una reforma histórica esperada con ansias tanto por los consumidores de esa droga como por los mercados.

Tres años después de su elección, el gobierno liberal de Justin Trudeau materializó una de sus promesas de campaña y Canadá se convirtió en el primer país del G-20 en tomar una decisión como ésta, la misma que Uruguay tomó en 2013.

"Hace al menos dos años que trabajamos con los diferentes gobiernos", dijo ayer Trudeau al repetir que la legalización permitirá restringir el acceso de menores a esta droga y "sacar dinero de los bolsillos de las organizaciones criminales".

En su campaña electoral de 2015, Trudeau reconoció haber fumado algunas veces en el pasado. Pero ahora aseguró que "él no prevé comprar o consumir cannabis una vez que esté legalizado".

Según estadísticas oficiales, 16% de la población canadiense fumó cannabis en 2017. Y según el Ministerio de Justicia, eliminar el mercado negro tomará al menos cuatro años. La legislación permite a las 13 provincias y territorios organizar la venta, con diferentes términos y condiciones de un lugar a otro.

Canadá habilitó el uso legal de la marihuana con fines medicinales desde 2001 y el gobierno de Trudeau trabajó durante dos años en expandir su uso a fines recreativos. El objetivo es presentar un mejor reflejo de la opinión cambiante de la sociedad en torno a la hierba y regular a los operadores en el mercado negro. Además, según los medios, se espera el anuncio de un proyecto para amnistiar, caso por caso, las penas por posesión de pequeñas cantidades de cannabis sentenciadas poco antes de la legalización.

Las redes sociales celebraron la decisión: los hashtags #legalizationday y #canadacannabis son trending topic desde hace horas.

Sin embargo, en los últimos días la oposición conservadora multiplicó sus ataques contra la medida, debido a que la considera precipitada y riesgosa para la seguridad y la salud pública.

¿Quién puede comprar y cultivar?

Un adulto puede poseer en público hasta 30 gramos de cannabis legal. Los hogares podrán cultivar hasta cuatro plantas de cannabis, excepto en Quebec y Manitoba, donde el cultivo estará prohibido. La edad legal para comprar cannabis está fijada en 18 años por la ley federal, pero todas las provincias y territorios lo elevaron a 19, con la excepción de Quebec y Alberta. El nuevo gobierno electo de Quebec, sin embargo, prometió aumentar la edad a 21 años.

¿Quién puede producir?

Las licencias de producción son otorgadas por el Ministerio de Salud, que autorizó a 120 compañías hasta la fecha. Las principales empresas cotizan en bolsa y ya producen cannabis para uso terapéutico. Cientos de solicitudes de licencia adicionales están bajo revisión.

¿Dónde se puede adquirir?

Las provincias y territorios son responsables de organizar las ventas en tiendas autorizadas. En seis de ellas se dispensará en tiendas públicas (como en Quebec), en otras cuatro en tiendas privadas, y en el caso de la Columbia Británica se venderá en tiendas públicas y privadas. Las ventas en línea se permitirán en todo el país: en Ontario, incluso, será la única forma de adquirir legalmente marihuana por ahora.

¿Qué se puede comprar y a qué precio?

Los canadienses podrán comprar cannabis seco o fresco, aceite de cannabis o semillas de origen autorizadas y podrán hacer muffins, pasteles o bebidas a base de cannabis. El comercio de todos los derivados debe permitirse dentro de un año.

Los precios de venta variarán de una provincia a otra: cada gramo debe tener un precio entre seis y 10 dólares, más un impuesto especial de un dólar canadiense (0,77 dólares) con una división de la recaudación entre el estado federal (un cuarto) y las provincias. Este y otros impuestos federales y provinciales sobre el consumo totalizan aproximadamente el 10 al 15% del precio, según la provincia.

¿Qué espacios están habilitados para consumir?

Los sitios aptos para fumar varían mucho de una provincia a otra, de una ciudad a otra o de un distrito a otro. En algunas provincias, como New Brunswick o Newfoundland, a los consumidores sólo se les permite fumar en sus hogares. Otros, como Quebec, lo prohibirán donde los cigarrillos ya estén prohibidos (bares y restaurantes, escuelas, parques infantiles). Sin embargo, algunas ciudades en Quebec pueden ser más restrictivas, con una prohibición de fumar en todo el espacio público.

Agencias AP, AFP y DPA