Con un nuevo ataque, Trump vuelve a agitar las divisiones raciales

WASHINGTON.- Sin escarmentar ante críticas o condenas, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recicló sus ataques con tintes racistas en Twitter contra opositores demócratas, al cargar contra otro congresista afroamericano, una ofensiva que volvió a generar un fuerte repudio entre sus opositores, pero que en su entorno calculan que podría ayudarlo a conseguir la reelección.

El blanco, esta vez, fue Elijah Cummings, férreo crítico de Trump y sus políticas, y una figura clave de la oposición en la Cámara de Representantes, ya que preside uno de los comités que ha asfixiado con investigaciones a la Casa Blanca. Trump lo castigó durante todo el fin de semana en Twitter, acusándolo de descuidar su distrito -que incluye alrededor de la mitad de Baltimore, en Maryland-, al que describió como "un desastre asqueroso, infestado de ratas y roedores", un lugar "muy peligroso y sucio", donde "ningún ser humano" querría vivir.

"¿Por qué se envía tanto dinero al distrito de Elijah Cummings cuando se considera el peor y más peligroso en cualquier parte de los Estados Unidos? Ningún ser humano querría vivir allí", tuiteó Trump, el sábado.

Más de la mitad de la población del distrito de Cummings es afroamericana. En Baltimore, esa proporción sube a 62%. El ingreso medio del distrito es levemente superior al del país, aunque la pobreza es mayor. Baltimore tiene la tasa de homicidios más alta del país entre las grandes ciudades, según cifras de 2017 del FBI. Los asesinatos aumentaron en los últimos años.

Tal como había ocurrido cuando Trump lanzó ataques racistas a cuatro nuevas congresistas demócratas conocidas como "el escuadrón", entre quienes está la naciente estrella de la oposición, Alexandría Ocasio-Córtez, la ola de mensajes del presidente contra Cummings despertó un fuerte rechazo entre sus críticos. Las etiquetas #SomosBaltimore y #TrumpEsUnaRata se convirtieron en tendencia en las redes.

"Es inaceptable", retrucó el alcalde de Baltimore, Bernard Young, también afroamericano, sobre los tuits de Trump. El periódico The Baltimore Sun, uno de los más antiguos del país, publicó una editorial contra Trump con un título durísimo: "Mejor tener algunas ratas que ser una". El diario vinculó el ataque de Trump a Cummings a una estrategia política.

"No es difícil ver lo que está pasando aquí", señala la editorial. "El congresista ha sido una espina para el presidente, y el Sr. Trump considera que atacar a los miembros afroamericanos del Congreso es buena política, ya que al mismo tiempo satisface a los supremacistas blancos que lo aman y provoca que muchas de las personas reflexivas que no lo aman, griten", señaló.

La líder demócrata en el Congreso, Nancy Pelosi, salió rápidamente a defender a Cummings.

"Todos rechazamos los ataques racistas contra él y apoyamos su firme liderazgo", tuiteó.

Los cruces por los mensajes racistas de Trump han comenzando a chupar el oxígeno en el debate político en Estados Unidos en el inicio de una nueva campaña presidencial. Sus funcionarios salieron otra vez a defender los mensajes del mandatario, al señalar que tiene derecho a cargar contra quienes critican su gobierno y sus políticas.

Trump siguió la pelea ayer, al atacar a Cummings y a Pelosi, de quien también criticó su distrito, al afirmar que estaba "irreconocible". En un tuit, Trump acusó a Cummings de ser racista y de ejercer un control "radical" sobre su gobierno. Trump ha rechazado las críticas o las acusaciones de racismo, y siempre ha utilizado en su defensa un mismo argumento: los afroamericanos, durante su presidencia, han avanzado.

"No hay nada racista en afirmar claramente lo que la mayoría de la gente ya sabe, que Elijah Cummings ha hecho un trabajo terrible para la gente de su distrito y de la misma Baltimore. Los demócratas siempre juegan la Carta de la Raza cuando no pueden ganar con hechos. ¡Vergüenza!", justificó ayer el mandatario.

Trump volvió a mencionar en sus mensajes que el desempleo entre los afroamericanos ha tocado mínimos históricos -aunque omitió que es más alto que entre los blancos-, y dijo que los demócratas han hecho muy poco por la población negra, que suele votar mayoritariamente a candidatos demócratas. Barack Obama, un demócrata, fue el primer presidente negro en la historia del país. El movimiento de los derechos civiles cobró fuerza y consiguió sus mayores logros durante las presidencias de John F. Kennedy y Lyndon B. Johnson, ambos demócratas. Abraham Lincoln, republicano, abolió la esclavitud.

Harto, un senador demócrata anunció que dejaría de seguir a Trump en Twitter. "Estoy dejando de seguir al presidente de Estados Unidos hoy en Twitter porque su feed es la más llena de odio, racista y degradante de las más de 200 personas a las que sigo, y regularmente arruina mi día leerlo", tuiteó el senador Chris Murphy, de Connecticut.

"No puedo creer que acabo de escribir eso", cerró.