Controversia en Alemania: la Corte declaró ilegal el tope a los alquileres en Berlín

BERLÍN.- El Tribunal Constitucional alemán anunció este jueves la anulación de una controvertida ley que fijaba topes para los precios de los alquileres en Berlín y que buscaba contener la disparada de los costos de vivienda en la capital, pero que se había convertido en una pulseada entre propietarios e inquilinos.

La norma, que entró en vigor en febrero de 2020, “no es compatible con la Constitución y en consecuencia es anulada”, declaró el tribunal con sede en Karlsruhe (sureste). Los argumentos sostienen que la legislación en materia de alquileres es competencia del Estado federal, por lo que el gobierno berlinés se excedió en sus competencias al promulgar esta ley, detalló la justicia, apoyando un recurso presentado por partidos de oposición conservadores y liberales de la ciudad.

La ley que iba a durar cinco años, fijaba un congelamiento de alquileres por dos años, y un tope para aumentos posteriores. Este emblemática legislación, impulsada por la coalición local entre izquierda y los Verdes, afectaba a todas las viviendas sin estrenar del parque privado, es decir, alrededor de 1,5 millones, según la ciudad.

En Berlín, entre 2007 y 2019, los alquileres subieron aproximadamente el 85%. Y aunque es una de las capitales más extensas de Europa, sufre escasez de viviendas a precios asequibles. Calificada años atrás como “pobre pero sexy”, la metrópolis de 3,6 millones de habitantes se convirtió en un polo económico dinámico que atrajo mano de obra joven y calificada en la última década.

Golpe para los inquilinos

La decisión judicial es “amarga”, afirmó Lukas Siebenkotten, presidente de la Asociación de Inquilinos, pidiendo a los legisladores nacionales que “actúen” para contener la explosión de los precios de los alquileres. Los hogares berlineses no solo tendrán alquileres más altos, sino que además podrían tener que reembolsar las rebajas obtenidas bajo esta norma, muy mala noticia en medio de la crisis económica ligada a la pandemia. ”Esto será particularmente difícil para los hogares de bajos ingresos”, advirtió el economista Claus Michelsen del Instituto DIW de Berlín.

No obstante, los dos gigantes inmobiliarios, Deutsche Wohnen y Vonovia, con decenas de miles de departamentos en Berlín, prometieron ser cuidadosos. “Ningún inquilino de Deutsche Wohnen perderá su casa por esta decisión”, declaró la empresa.

Como era de esperar en cambio, conservadores y profesionales inmobiliarios aplaudieron la decisión del Tribunal. El ministro de Economía, Peter Altmaier, se manifestó “aliviado”, dado que la intervención de la ciudad en los alquileres podría “frenar o limitar la construcción de nuevas viviendas”. A causa del tope, “muchos habían puesto sus inmuebles en venta y el mercado se hundía (-57,5%, según especialistas)”, afirmó el presidente de la federación de propietarios, Kai Warnecke.

Para algunos el congelamiento de alquileres habría limitado los trabajos de modernización de los propietarios, sobre todo de adaptación a las mejoras medioambientales. Los berlineses consagran aproximadamente un cuarto de su salario en alojamiento. Solo el 18,4% son propietarios de sus viviendas, una de las tasas más bajas de Europa.

Agencia AFP