Crisis en Venezuela: por qué las Fuerzas Armadas se mantienen leales a Maduro
CARACAS (Reuters) - Alentados por la juramentación del jefe de la opositora Asamblea Nacional, Juan Guaidó, como "presidente encargado" de Venezuela y el posterior reconocimiento por Estados Unidos y gran parte de la región, la oposición venezolana se atreve a soñar que los días del presidente Nicolás Maduro en su cargo están contados. Pero la base del impopular líder, las Fuerzas Armadas, muestra pocos signos de erosión.
Pese al entusiasmo renovado en la oposición, la Asamblea Nacional, de mayoría opositora y despojada de sus poderes por el Tribunal Supremo de Justicia, tiene poco margen de acción frente a las pocas señales de que el alto mando militar esté preparado para abandonar a Maduro. Así, la nueva primavera del sector opositor -y la emoción que ha generado entre los inversores- puede resultar prematura.
Un pequeño alzamiento en Caracas el lunes último por parte de dos docenas de oficiales de la Guardia Nacional de bajo rango despertó las esperanzas de la oposición de un levantamiento, pero el incidente se extinguió rápidamente.
"A un sargento de tropa profesional en un destacamento de la guardia no le doy importancia, importancia es que haya una situación en una unidad mayor o un batallón", dijo Rocío San Miguel, experta militar del grupo no gubernamental, Control Ciudadano. "Los comandantes militares son leales a Maduro".
Enojo y amnistía
Los soldados tienen muchas razones para estar enojados.
Las instalaciones militares están decayendo en forma constante junto con el resto del país, y los salarios desaparecen rápidamente en medio de una inflación anual de 2 millones por ciento al cierre del 2018.
Más de 4000 oficiales de bajo rango desertaron el año pasado, según documentos oficiales vistos por Reuters.
Los legisladores de la oposición están desarrollando una propuesta de amnistía con la intención de persuadir a militares descontentos para que abandonen a Maduro, basándose en lo que dicen son conversaciones con oficiales activos que están ansiosos por el cambio.
Cliver Alcalá, un general retirado del ejército que estuvo cerca del fallecido presidente Hugo Chávez pero se peleó en 2016 con el gobernante Partido Socialista, dijo que la juramentación de su segundo mandato, el 10 de enero, dañó la imagen de Maduro entre las tropas.
"Los cuarteles no están totalmente convencidos de que Maduro realmente sea presidente", dijo Alcalá en una entrevista telefónica desde Colombia.
La estrategia de Maduro
Pero Maduro ha trabajado duro para mantener a los militares al margen, bien al tanto de su rol crucial.
Ha nombrado oficiales a cargo de puestos clave en el gobierno y en la petrolera estatal PDVSA, al tiempo que ofrece lucrativos contratos de servicios en yacimientos petrolíferos para firmas vinculadas al ejército.
El liderazgo militar es fiel a Maduro y lo seguirá siendo hasta que él se vaya
Y las autoridades han perseguido a oficiales sospechosos de conspirar que, según grupos de derechos humanos, han llevado a la tortura de presuntos disidentes y al abuso de familiares.
A cambio, las fuerzas armadas han permanecido en silencio mientras el colapso económico ha dejado a millones luchando por comer.
Las fuerzas de seguridad reprimieron brutalmente las protestas callejeras de la oposición en 2017, y ese mismo año respaldaron la creación de una Asamblea Nacional Constituyente que suplantó al Congreso dirigido por la oposición.
"El liderazgo militar es fiel a Maduro y lo seguirá siendo hasta que él se vaya", dijo un oficial militar de alto rango en servicio activo que pidió no ser identificado.
"No están en lo más mínimo preocupados por mantener sus compromisos profesionales, están preocupados por protegerse a sí mismos", agregó.
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