Cumbre de Peres y Arafat en Berlín para buscar una tregua
JERUSALEN.- La posibilidad de negociar una tregua en Medio Oriente cobró fuerza ayer durante una jornada de intensas gestiones diplomáticas en la que el presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat, y el ministro de Relaciones Exteriores israelí, Shimon Peres, aceptaron una oferta del gobierno alemán y anunciaron que se reunirán en Berlín en los próximos días.
La iniciativa alemana contó con el decidido apoyo del gobierno norteamericano, expresado a través del vocero del Departamento de Estado, Phillip Reeker, quien afirmó que cualquiera sea la metodología que complazca a ambas partes, la apoyaremos". Añadió: "Los alemanes son amigos confiables".
A su vez, el gobierno ruso señaló que Moscú y Washington están listos para instrumentar "un plan que permitirá a un tercer país" supervisar el proceso de paz entre palestinos e israelíes, dijo Vasily Sredin, enviado del presidente Vladimir Putin a Medio Oriente.
El anuncio de la reunión entre Arafat y Peres fue el resultado de una nueva misión en Medio Oriente del ministro de Relaciones Exteriores alemán, Joshka Fischer.
Fischer se reunió en la mañana con Arafat en Ramallah (Cisjordania) y luego se trasladó a Jerusalén, donde se entrevistó con el primer ministro israelí, Ariel Sharon. Pero más tarde debió regresar de inmediato a Ramallah para reunirse de nuevo con el líder palestino en un encuentro no previsto.
Fuentes cercanas al premier israelí señalaron que a su segundo encuentro con Arafat "Fischer llevó un mensaje de Sharon con el fin de recibir garantías de que la violencia palestina no se reanudará antes, durante o después de la entrevista con Peres".
Al respecto, "tenemos esperanzas pero no demasiadas expectativas", dijo el asesor de Sharon para asuntos exteriores Zalman Shoval.
De todas formas, la reunión en Berlín no tendrá lugar antes de principios de la semana próxima, ya que Peres tiene previsto viajar a Polonia, donde permanecerá hasta el 26 del actual, mientras que Arafat viajará hoy a El Cairo, para una cumbre extraordinaria de la Liga Arabe, y mañana estará en Pekín.
Fischer destacó que el objetivo de sus esfuerzos en la región es "aplicar el plan Mitchell", que plantea el cese total de la violencia seguido de un período de calma y de una etapa en la que se aplicarán medidas para restablecer la confianza mutua, con miras a reanudar las negociaciones y alcanzar una solución final al conflicto.
De hecho, el gobierno israelí reforzó ayer su posición en este sentido, y afirmó en un comunicado que mantiene su exigencia de un período de prueba antes de la aplicación del plan Mitchell. "No hemos renunciado a ese período de calma de siete días, que ha sido acordado con el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell", indicó.
Atentado fallido
En Jerusalén, en tanto, un atentado con coche bomba -que no causó víctimas- volvió a poner en evidencia la urgente necesidad de reanudar el diálogo.
El atentado, reivindicado por un grupo cercano a Al Fatah, el movimiento de Arafat, tuvo lugar en dos etapas. Según la policía israelí, el artefacto que explotó primero debía llamar la atención de la policía antes de que estallara una segunda carga, colocada en los alrededores del cuartel general de la policía, sobre una calle donde hay numerosos bares y restaurantes. Expertos de la policía evitaron que esta última explotara.
Más leídas de El Mundo
Inquietud en EE.UU. El colapso del puente de Baltimore expuso un punto débil de la mayor potencia económica del mundo
Grietas en la izquierda regional. La última maniobra electoral de Maduro provocó una inesperada reacción de Lula
Trilema de Lessing. "La realidad de América Latina le dio la razón: no podés disminuir narcotráfico, corrupción y violencia en simultáneo"