El impactante relato de una argentina que estuvo en el atentado en Turquía: "Sentimos terror"

ESTAMBUL.- Fueron al menos tres las personas que desataron anoche el pánico en Turquía . Estaban armados con fusiles de asalto Kalashnikov y abrieron fuego contra las personas en el control de la entrada a la terminal de llegada de vuelos internacionales de Atatürk. Dos de ellos se inmolaron poco después; el tercero lo hizo en el estacionamiento. Así, mataron a 36 personas e hirieron a más de 140.

Candela Glikin estaba allí cuando todo sucedió. Tiene 24 años, viajó con su novio y llegó a Turquía para pasar sólo un par de horas: su destino final era Dinamarca ; allí pasará un año entero.

Pero la emoción que sintió ni bien se bajó del avión y pensó en todas las cosas que estaba por vivir se transformó en pánico cuando caminó apenas unos pasos en tierra firme y vio una especie de avalancha de gente que se le acercaba a una velocidad inaudita y con la cara desfigurada.

"Teníamos una espera de ocho horas en Estambul, pero íbamos a ir a un hotel porque Turkish Airlines te lo provee cuando comprás el pasaje. Cuando vimos que se nos acercaba toda esa gente, comenzamos a correr y terminamos todos en la manga de un avión. Había nenes llorando, gente mayor desesperada y en el medio nosotros que no entendíamos nada de lo que pasaba ni de lo que decían. Sí pudimos entender la palabra bomba", contó Candela en una entrevista con Radio Latina desde el aeropuerto, al que volvió para ahora sí volar a Copenhagüe.

"Decían algo de armas y bombas; nosotros sentíamos terror. Tuvieron que pasar horas hasta que conseguimos tranquilizarnos y que la situación se normalice. Tardamos horas para ingresar al país y que nos sellaran los documentos", continuó.

Luego, Candela contó que todos los que eran argentinos, unos 33, se juntaron en uno de los rincones del aeropuerto, que consiguieron ponerse en contacto con los funcionarios del consulado argentino en Turquía y que fue la funcionaria del consulado, Graciela Ratto, la que se acercó y se ocupó de la situación.

"Fuimos al consulado para comunicarnos con nuestras familias, para tranquilizarnos. Después fuimos para el hotel. El aeropuerto es gigante y a la salida vimos mucha sangre, estaba todo roto, lleno de vallas. Lo que más me impactó fue la sangre en el piso. La cantidad de gente corriendo. No escuchamos nada, solo gritos. Me la pasé llorando toda la noche, fue terrible".

Antes de finalizar, y a punto de abordar un nuevo vuelo, Candela contó que en el aeropuerto la actividad se está normalizando y que respecto a los destrozos del día anterior no se ve nada: "Como si no hubiera pasado".

Desde el consulado

Graciela Ratto, funcionaria del consulado argentino en Turquía, habló en radio Continental y aseguró que todos los argentinos que estuvieron en el aeropuerto en el momento del triple ataque "están bien".

Además, Ratto comentó que se trataban de todos pasajeros que estaban en tránsito, que no tenían pensado hacer turismo en Turquía, y que fueron trasladados a los hoteles que tenían reservados.

Sobre la seguridad en el lugar, advirtió: "La presencia policial en los lugares turísticos es muy alta y visible, lo mismos ocurre en el aeropuerto, donde hay muchas medidas de seguridad. La presencia es notoria".

A su vez, el cónsul general argentino Martín Laforgue, en diálogo con La Once Diez, dijo que quienes quieran obtener más información sobre los incidentes y los argentinos que están en el país, pueden comunicarse al (0090) 02122431170.