En África, Melania Trump se abre su propio camino en su primera gira sola
ACCRA, Ghana.- Melania Trump dejó Washington -y la sombra de su marido- para iniciar una gira por cuatro países de África que dará a la glamorosa y a veces enigmática primera dama de Estados Unidos la oportunidad de labrar su propio camino diplomático.
En la primera gira internacional sin su marido, Melania llegó hoy a Ghana y luego visitará Malawi, Kenya y Egipto. Regresará a Estados Unidos el domingo próximo.
Una primera dama que viaja al extranjero sin el presidente no es algo nuevo: Michelle Obama lo hizo en varias ocasiones, en el sur de África, en China y en Camboya. Pero el perfume de misterio que rodea a Melania, dos años después de la elección de su marido, y las palabras de Trump sobre África que causaron oleadas de indignación, dan a este viaje un aire particular.
Según The New York Times, la primera dama intentará brindar una cara más amable de la administración de Trump en el extranjero, una semana después de que el presidente norteamericano rechazara el "globalismo" en la Asamblea de la ONU.
El trabajo de Melania será arduo. El lenguaje que usó Trump para calificar a África muchas veces fue despectivo. El presidente se refirió a Haití como un "país de mierda" y dijo que los inmigrantes nigerianos viven en "chozas" en su país. Antes, desató una cruzada para comprobar que Barack Obama había nacido en Kenya y que por eso no podía ser presidente de Estados Unidos.
La primera dama norteamericana también tuvo sus propios traspiés diplomáticos. En 2011, Melania, que nació en Eslovenia, sugirió que Obama no había nacido en Estados Unidos. Y este año causó revuelo cuando usó una campera de Zara que tenía escrita la frase "Realmente no me importa, ¿a vos?" cuando fue a visitar un albergue de chicos inmigrantes en Texas.
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Melania llegó a Accra, la capital de Ghana, a media mañana, y recorrió la alfombra roja en el aeropuerto de Kotoka ante una fila de estudiantes en uniforme amarillo y marrón, que agitaban banderas de Ghana y de Estados Unidos mientras grupos interpretaban música tradicional. Del aeropuerto se trasladó a la residencia presidencial, donde se reunirá con el jefe de Estado, Nana Akufo-Addo.
La visita "diplomática y humanitaria" de Melania, según los términos de su vocera, Stephanie Grisham, pondrá el acento en los chicos. "Bien sea por la educación, la adicción a las drogas, el hambre, la seguridad en Internet, las intimidaciones, la pobreza o las enfermedades, los chicos son demasiado a menudo las primeras víctimas en el mundo", explicó días atrás en Nueva York.
En su gira por África, Melania quiere resaltar el trabajo de la Usaid -la agencia americana para el desarrollo-, en un momento en el que el gobierno de su esposo está siendo presionando para reducir de manera radical la ayuda de Estados Unidos alrededor del mundo.
La primera dama tiene previsto visitar una reserva donde se protegen especies de animales en riesgo, amenazadas sobre todo por la caza furtiva. Precisamente meses atrás Trump debilitó la normativa sobre los trofeos de caza y alivió la prohibición que Obama había decidido sobre la importación de colmillos de elefantes y cuernos de rinoceronte.
Tanto en Estados Unidos como en la escena internacional, Melania ha mantenido hasta ahora distancia, lo que supuso un contraste con sus predecesoras. "[Hasta ahora] no fue la abogada o la vocera de sus políticas", explicó Anita McBride, la antigua jefa de personal de Laura Bush, esposa de George W. Bush, que enseña hoy en la American University, de Washington.
"Muchas primeras damas fueron bazas políticas para sus maridos, incluso cuando estos eran muy impopulares", recuerda McBride, que citó, entre otros, el caso de Lady Bird Johnson, esposa de Lyndon Johnson, que viajó por el sur de Estados Unidos durante la campaña presidencial de 1964.
Melania, "mujer de pocas palabras", es "muy independiente, lo mostró desde el primer momento, justo después de la elección, cuando señaló que no se mudaría de inmediato a Washington", añadió McBride.
En su típico estilo, fue Donald Trump quien anunció la semana pasada que su esposa "haría una gran gira por África".
"Nosotros amamos África. Es muy lindo, el lugar más hermoso del mundo, en muchas formas", dijo Trump. Aunque el presidente le haya robado protagonismo, para Melania el viaje significa una oportunidad para adueñarse de su agenda.
Agencias AFP y DPA
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