Encuentran pertenencias del colaborador de Wikileaks desaparecido en Noruega y crece el misterio
OSLO.- En medio de la incertidumbre provocada por la misteriosa desaparición en Noruega del colaborador holandés de Wikileaks Arjen Kamphius, fuentes policiales confirmaron hoy que encontraron en el mar, en el norte del país, algunas de sus pertenencias.
Kamphuis, un experto en ciberseguridad de 47 años considerado un asociado del fundador de WikiLeaks , Julian Assange, fue visto por última vez el 20 de agosto cuando abandonaba su hotel en Bodo, en el norte del país escandinavo, donde estaba de vacaciones. Desde entonces, su desaparición es un misterio que suma cada vez más teorías.
Según indicaron las autoridades locales un pescador encontró ayer varios objetos flotando en el agua que pertenecen al desaparecido, a unos 50 kilómetros al este de Bodo. Por el momento, la policía y los socorristas se encuentran rastreando la zona, tanto en el agua como en la superficie, aunque no brindaron mayores precisiones. "Debido a la investigación en curso, la policía no quiere en este momento revelar información sobre los artículos específicos que se han encontrado", aclararon en un comunicado.
Además, la policía había dicho anteriormente que no tenía una teoría principal sobre su desaparición y que no había indicios de que Kamphuis hubiera sido víctima de un acto criminal. De todas formas las autoridades manejas tres opciones: desaparición voluntaria (que incluye el suicidio), un accidente o un acto criminal.
"No hemos avanzado lo suficiente en nuestra investigación como para poder eliminar o confirmar una de estas tres teorías", señaló el inspector Bjarte Walla. "Mantenemos abiertas todas las posibilidades", agregó.
Sin embargo, según Ancilla van de Leest, una amiga del desaparecido, Kamphuis no mostraba "absolutamente ningún signo de querer desaparecer", al contrario, "tenía muchos proyectos, tanto privados como profesionales".
Después de tres semanas, la desaparición, considerada "extraña" por WikiLeaks, alimenta otras teorías en las redes sociales. Algunas contemplan la mano oculta de la CIA o la de Rusia , o incluso se especula que podría tratarse de una desaparición deliberada para realizar un proyecto secreto en beneficio de Assange.
El misterio se acrecienta además por el hecho de que el teléfono de Kamphius fue detectado el 30 de agosto por una antena de telefonía cerca de Stavanger (sudoeste), a más de 1600 kilómetros de Bodo y la policía aún no sabe si fue él mismo quien lo activó.
Agencias Reuters y AFP
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