Expectativa en Irán tras las elecciones legislativas

TEHERÁN.- Los iraníes fueron ayer a las urnas para elegir un nuevo Parlamento, con los conservadores como favoritos en unos comicios que resultarán un termómetro del respaldo popular que tiene el liderazgo de la República Islámica, en momentos en que las sanciones golpean su economía y aíslan al país en el plano diplomático.

Fue la primera ocasión en que los iraníes votaron desde que Estados Unidos reimpuso en 2018 un régimen de sanciones, luego de que Washington se retirara del acuerdo nuclear firmado en 2015. Los resultados se conocerán recién desde hoy.

Las encuestas anticipaban una victoria holgada de los conservadores, debido al desencanto de buena parte de la población con el presidente moderado Hassan Rohani, sobre todo a raíz de la crisis económica, la corrupción y la desconfianza hacia las autoridades que provocó el derribo accidental del avión ucraniano en enero pasado.

Además, la oferta electoral se redujo dramáticamente luego de que el Consejo Guardián de la Constitución descalificara a más de 7.000 candidatos, la mayoría reformistas y moderados, incluidos 81 parlamentarios en funciones. Por ese motivo, la elección se convirtió virtualmente en un duelo entre conservadores y ultraconservadores, lo que podría llevar a muchos votantes a abstenerse. Dependiendo del peso de los ultraconservadores en el futuro Parlamento, la política exterior de apertura aplicada por Rohani desde 2013 podría cambiar.

Los analistas estaban particularmente pendientes de la participación, mientras que las autoridades anunciaron consecutivamente tres aplazamientos del cierre de la jornada electoral. Esto llevó ayer al ayatollah Ali Khamenei a incitar a los casi 58 millones de electores a participar de forma masiva para "garantizar el interés nacional".

Agencias AP y AFP