Israel rechazó al nuevo gobierno palestino
GAZA.- Tras meses de arduas negociaciones y con la esperanza de poner fin a la violencia interna y al aislamiento internacional, las facciones palestinas Hamas y Al-Fatah lograron ayer formar un nuevo gobierno de unidad nacional, que fue inmediatamente rechazado por Israel.
El vocero israelí Mark Reguev dijo que su país no tratará con las nuevas autoridades palestinas y pedirá a la comunidad internacional que haga lo mismo. "La posición israelí se mantiene intacta. No reconoceremos ni trataremos con este gobierno o con algunos de sus miembros", declaró Miri Eisin, vocero de la presidencia del Consejo.
Se espera que Estados Unidos adopte también esta postura, aunque la Unión Europea afirmó que era demasiado pronto para decidir si levantará las sanciones económicas impuestas al saliente gobierno controlado por Hamas, un grupo fundamentalista que aboga por la destrucción de Israel y ha asesinado a centenares de civiles en atentados.
De esta forma, la conformación el nuevo gobierno palestino -que según su plataforma "respeta" acuerdos de paz pasados, pero no cumple con la tres condiciones exigidas por Israel- ha frustrado las esperanzas de una rápida reanudación de las negociaciones de paz. (Ver aparte.)
Israel y los mediadores conocidos como el Cuarteto para Medio Oriente -Estados Unidos, la Unión Europea, las Naciones Unidas y Rusia- han manifestado que Hamas debe renunciar a la violencia, reconocer el derecho de Israel a existir y aceptar los acuerdos de paz existentes. La plataforma del nuevo gobierno incluye sólo una vaga promesa de "respetar" los acuerdos de paz del pasado, pero no menciona ningún reconocimiento explícito de Israel.
Un difícil acuerdo
La composición de un gobierno palestino de unidad, llamado a poner fin a una grave crisis política, fue anunciada ayer tras un difícil acuerdo entre el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, y el primer ministro, Ismail Haniyeh.
La creación de este gabinete, negociada durante varios meses por los movimientos rivales Al-Fatah, de Abbas, y Hamas, de Haniyeh, estuvo marcada por la violencia interna que costó la vida a decenas de palestinos entre diciembre y febrero, e hizo temer el estallido de una guerra civil. El acuerdo para avanzar hacia un gobierno de unidad se logró el 8 del mes último en La Meca.
Hamas tendrá, además de Haniyeh, por lo menos diez ministros, frente a seis para Al-Fatah. El gabinete también incluirá a ocho ministros "independientes".
El nuevo equipo asumirá la ardua tarea de poner fin a la crisis política interna y tratar de que se levante el boicot diplomático y financiero impuesto luego de la victoria electoral en enero de 2006 de Hamas.
El Parlamento palestino se reunirá mañana para votar la investidura del nuevo gobierno. "Esperamos que este gobierno marque el inicio de una nueva era y permita pasar la página", declaró Haniyeh.
Israel se rehusó oficialmente a reconocer al nuevo gabinete. "Desafortunadamente, no hay nada explícito o implícito en el programa que muestre una aceptación de los tres puntos de referencia de la comunidad internacional", dijo el vocero gubernamental, Mark Regev.
"Esperamos que la comunidad internacional nos apoye y no colabore con un gobierno que tiene un programa de gobierno extremista", indicó, por su parte, el ministerio de Asuntos Exteriores israelí.
La Unión Europea y Estados Unidos reaccionaron con prudencia. "No tomaremos ninguna decisión antes de poder juzgar el programa y los actos del nuevo gobierno", declaró la vocera de la Comisión para las Relaciones Exteriores de la Unión Europea, Emma Udwin.
"Esperamos que el presidente Abbas disponga de los medios para cumplir con las condiciones impuestas por el Cuarteto con el fin de que se pueda negociar con el gobierno de Israel", declaró, por su parte, el vocero de la Casa Blanca, Tony Snow.
Más leídas de El Mundo
Caos en Georgia. Un diputado opositor le dio una trompada al líder de un partido oficialista y desató una batalla campal
Aliado inesperado. El antiguo enemigo de Israel que se sumó a la coalición que neutralizó el ataque iraní
Tras el ataque iraní. Todas las opciones de respuesta que tiene Israel entrañan riesgos