Kim Jong-un derribó con una explosión la oficina de diálogo con Corea del Sur

SEÚL.- A días de anunciar una nueva crisis con su vecino del sur y de cortar los canales de comunicación por culpa, según dijo, de un grupo de activistas que lanzaron panfletos contra Pyongyang a través de la frontera, Corea del Norte derribó con una explosión la oficina de enlace intercoreana.

Ante el estancamiento de las negociaciones nucleares con el gobierno de Estados Unidos, el régimen de Kim Jong-un intenta aumentar la presión y por eso tomó esta medida, para corresponder con la "mentalidad de la gente enojada que fuerza a la escoria humana y para que aquellos que han protegido a la escoria paguen caro sus delitos'', dijo la Agencia Central de Noticias de Pyongyang, en referencia a los desertores norcoreanos que desde hace años lanzan propaganda contra la hermética nación.

La agencia no ofreció detalles sobre cómo se había producido la destrucción de la oficina, pero dijo que quedó "trágicamente arruinada con una terrible explosión". La detonación tuvo lugar horas después de que el Ejército norcoreano amenazara con volver a instalarse en las zonas desmilitarizadas bajo los tratados de paz con Corea del Sur, algo que según los expertos podría crear amenazas de seguridad a lo largo de las fronteras terrestres y marítimas.

Desde principios de este mes, Pyongyang multiplicó los ataques verbales contra su vecino. De hecho, la semana pasada, al hacer el anuncio del fin de las comunicaciones políticas y militares, habló del "enemigo" surcoreano. Y el fin de semana pasado Kim Yo-jong, la hermana del líder norcoreano, dijo y auguró: "Dentro de poco la inútil oficina de relaciones entre el Norte y el Sur quedará completamente destruida".

Algunos expertos dicen que el Norte está expresando su frustración porque Seúl no puede reanudar los proyectos económicos conjuntos debido a las sanciones impuestas por Estados Unidos.

Todo listo

Mientras tanto, los medios de Corea del Norte advierten que el Ejército está "totalmente preparado" para actuar contra Corea del Sur. El mayor general del Ejército Popular de Corea indicó que trabajaba en un "plan de acción" para "transformar en fortaleza la línea de frente", según la agencia oficial. Esta medida implicaría la reocupación de zonas que estaban desmilitarizadas en virtud de un acuerdo intercoreano, dijo.

Los folletos lanzados, señalados como causa de las tensiones, muchas veces son enviados con globos hacia territorio norcoreano o dentro de botellas que se lanzan al río que marca la frontera. Suelen contener críticas a Kim Jong-un en materia de derechos humanos o por su programa nuclear.

La Guerra de Corea (1950-1953) terminó con un armisticio, no con un acuerdo de paz, lo que significa que los dos países técnicamente todavía están en guerra.

Agencias AP y AFP