Maduro congela el diálogo con la oposición tras las sanciones de Trump: "¿Quieren batalla? Estamos listos"

CARACAS.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tomó su decisión y su par de Venezuela, Nicolás Maduro, reaccionó. En protesta por las sanciones económicas que esta semana le impuso Washington, el bolivariano se bajó de la mesa de diálogo con la oposición, en medio de la crisis social, política y financiera que sacude al país. "Tomé la decisión de parar todo", dijo.

"El presidente ha decidido no enviar a la delegación venezolana en esta oportunidad, en razón de la grave y brutal agresión perpetrada de manera continuada y artera por parte de la administración de Trump contra Venezuela", asegura un boletín compartido por el ministro chavista Jorge Rodríguez por Twitter, de acuerdo con lo publicado por El Nacional.

Así, a pocas horas de iniciarse una nueva ronda con la oposición, Maduro tomó la decisión de no participar de los encuentros del 8 y 9 de agosto para continuar las conversaciones en el marco de la iniciativa promovida por Oslo desde mayo con el objetivo de lograr una salida pacífica al estancamiento entre el gobierno y la oposición.

Incluso, Caracas indicó que se "dispone a revisar los mecanismos de ese proceso" para asegurar que su continuación sea realmente "efectiva" y "armónica" con los intereses del país.

En una llamada telefónica a un programa de la televisora estatal que conduce Diosdado Cabello, jefe de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, Maduro afirmó que Estados Unidos "se volvió loco". "He propuesto que se establezca una agenda permanente de diálogo, pero esta semana el imperialismo norteamericano se volvió loco y metió una puñalada trapera al alma de Venezuela (...) y ellos [la oposición] salieron a hacer fiesta, a aplaudir", declaró telefónicamente Maduro y aludió así a los comentarios del líder de la oposición Juan Guaidó, que apoyó la medida de Trump.

Además dijo que su gobierno tiene "fórmulas" para hacer frente a la "agresión" de Washington, que aseguró se dio en respuesta a la crisis en Estados Unidos tras dos masacres ocurridas el fin de semana, y que el 10 de agosto se realizará una protesta mundial en rechazo a las sanciones. "¿Quieren batalla? Vamos a la batalla pues. Estamos listos".

La delegación de la oposición, que ya está en Barbados, exige elecciones, pero el bolivariano las descarta y planteaba en cambio un acuerdo de "convivencia democrática" y el levantamiento de sanciones.

Washington encabeza la presión internacional para propiciar la salida de Maduro y el apoyo al opositor Juan Guaidó, jefe del Parlamento a quien reconoce como gobernante encargado del país petrolero junto con medio centenar de naciones.

En este marco y hace dos días Trump acordó nuevas sanciones que implican la congelación de todos los activos del gobierno venezolano en Estados Unidos y permiten al Departamento del Tesoro sancionar a cualquier persona, empresa o entidad que ayude a la administración de Maduro.

Agencias AP y AFP