Manifestantes iraníes atacaron la embajada de Arabia Saudita en protesta por la ejecución de un líder chiíta

TEHERÁN.- El consulado saudí en Mashaad, al norte de Irán, fue atacado con bombas incendiarias en respuesta a la ejecución del líder religioso chiíta Nimr Baqer al Nimr, que Arabia Saudita llevó a cabo hoy junto a la sentencia de muerte de otras 46 personas condenadas por terrorismo.

Las imágenes y videos del incendio en la planta baja de la embajada fueron difundidas por las redes sociales. Allí se puede ver a los manifestantes escalando las cercas que protegen el edificio y apoderarse de la bandera saudí.

Los condenados habían sido ejecutados en doce ciudades diferentes y Al-Nimr fue asesinado hoy después de que en octubre pasado el Tribunal Supremo confirmara su condena a pena de muerte por desobedecer a las autoridades e instigar a la violencia sectaria.

El vocero del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Hosein Yaber Ansarí, denunció "la profunda imprudencia e irresponsabilidad" del gobierno de Arabia Saudita, y había advertido que "pagará duro" esa acción.

En las imágenes que retratan la noche iraní se observan grandes columnas de fuego producidas por las bombas incendiarias arrojadas contra el edificio, parcialmente en llamas.

Algunos manifestantes lograron penetrar en la embajada y la estarían saqueando, según las imágenes.

Crece la tensión

La reacción de Arabia Saudita no tardó en aparecer y acusó a Irán de ser un país "sin vergüenza", de apoyar al "terrorismo" y de menoscabar la estabilidad regional, tras las protestas de Teherán.

"El régimen iraní es el último en poder acusar a otros de apoyar al terrorismo, en tanto él mismo lo hace", declaró un vocero del ministerio de Relaciones Exteriores a la agencia oficial SPA.