Nuevo golpe para Piñera: dimite el jefe de la policía

VALPARAISO (De nuestro corresponsal).- Un nuevo y duro golpe sufrió ayer el gobierno del presidente chileno, Sebastián Piñera, luego de la renuncia del general director de Carabineros, Eduardo Gordon, a una semana de la muerte del joven Manuel Gutiérrez, de 16 años, a manos de la policía, durante un paro nacional.

La nueva crisis se presentó sólo 24 horas antes de la reunión que el mandatario sostendrá hoy con los estudiantes para allanar el diálogo para la búsqueda de soluciones para la crisis de la educación que conmociona al país desde hace más de tres meses.

El confuso actuar de los carabineros tras la muerte del adolescente, sumado a las acusaciones de uso excesivo de la fuerza y hasta de tortura de los manifestantes, llevó a los estudiantes y a la oposición a pedir la renuncia del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, de cuya cartera depende la institución que controla la seguridad en Chile.

Un peritaje de la Policía de Investigaciones (PDI) determinó que fueron los disparos de un carabinero los que mataron a Gutiérrez. También, que éstos no fueron efectuados al aire, como decía la versión inicial, sino de forma directa.

El martes pasado, Gordon pidió perdón a la familia de Gutiérrez y ordenó la salida de nueve carabineros, incluido un general.

Cuando el conflicto parecía apaciguado, una denuncia periodística acusó a Gordon de haber adulterado un parte oficial que implicaba un choque automovilístico de su hijo, y lo llevó ayer hasta el palacio presidencial de La Moneda para presentar a Piñera un informe al respecto, junto con su renuncia, cansado -según dijo- de "tanta maldad y tanta basura hacia las instituciones".

"Jamás he intervenido en ningún tipo de situaciones de procedimiento y menos cuando se ha visto involucrado un ser querido [?]. Es complejo tomar estas medidas para mantener la confianza y credibilidad de las personas en carabineros de Chile", explicó Gordon.

"Es cierto que a veces se cometen graves errores, pero también es cierto que se trata de una institución fundamental para nuestra convivencia civilizada, para que podamos desarrollarnos como país y para que cada uno de nosotros pueda levantarse día a día para desarrollar su vida en forma normal", respondió Hinzpeter, tras formalizar la salida de Gordon.

El general también había sido acusado por parlamentarios de espionaje telefónico.

Para esta mañana, en tanto, está planificada la reunión entre Piñera, funcionarios, estudiantes universitarios y secundarios, rectores y profesores.

En medio de la actividad, y pocas horas después de haber establecido que su gobierno no está dispuesto a ceder en la gratuidad y el fin del lucro en la educación, el mandatario hizo un nuevo llamado a confiar en el diálogo e incluso pidió ayuda divina.

"El gobierno va a esa reunión con muchas esperanzas y con muy buena voluntad de lograr acuerdos que nos permitan solucionar los problemas [?]. Nuestro gobierno está comprometido en cuerpo y alma con darles a todos nuestros niños y jóvenes una educación de calidad, y ese compromiso lo compartimos con los estudiantes", dijo Piñera.

"Estamos comprometidos con resolver los problemas por los caminos del diálogo y la buena voluntad, y estoy seguro de que los estudiantes, los profesores, los padres, apoderados y todos los ciudadanos tienen puestas muchas esperanzas en que mañana la reunión sea fecunda, fructífera, y nos ayude a resolver los problemas. Y que Dios ayude", finalizó diciendo el presidente.

Ayer hubo 22 detenidos durante una marcha de más de 2000 secundarios pertenecientes a una organización que no estará en la reunión con Piñera.