Coronavirus. Paseos y ejercicios: los españoles inundaron las calles

MADRID.- Desde hace más de dos siglos, Madrid amanece con entusiasmo cada 2 de mayo. Ayer, el clima era de ebullición, pero no por la celebración de la histórica victoria contra la invasión francesa. Luego de seis semanas de confinamiento, los españoles pudieron salir por primera vez a la calle para pasear o hacer actividad física. También salieron, en otra franja horaria, los mayores de 70 años.

Las ciudades recobraron su ritmo, aunque no siempre se respetó el distanciamiento social. Cuando ambos grupos regresaron a sus hogares, el presidente Pedro Sánchez anunció un fondo de 16.000 millones de euros de ayuda para las comunidades y el uso obligatorio de barbijos en el transporte público desde mañana.

Tras 48 días de confinamiento, los españoles inauguraron una nueva fase de la denominada "desescalada" del estado de alarma para controlar la pandemia del coronavirus. "Quiero transmitir un mensaje de esperanza. Estamos recogiendo los frutos del sacrifico colectivo", dijo Sánchez, que aseguró que se disminuyó 66 veces el nivel de contagio. El gobierno estableció franjas de movilidad: de 6 a 10 o de 20 a 23 para actividad física de modo individual o paseos en parejas, en caso de que convivan; de 10 a 12 o de 19 a 20, para los mayores de 70 años o personas con discapacidad; y de 12 a 19 para los menores de 14 años. En todos los casos, los paseos deben efectuarse en un radio de un kilómetro de su domicilio durante una hora como máximo.

Desde temprano, las ciudades recobraron su ritmo de sábado por la mañana. Cuando no se respetaba la distancia social, en parques y calles, la policía debía intervenir. También controló accesos de vehículos a la ciudad auto por auto. También está permitido el paseo en bicicleta, elección del ingeniero Eduardo García, que vive en Valladolid y que se trasladó al Cerro de las Contiendas, donde hay una senda para ciclistas. "Estoy ringlado [agotado]", dice el hombre, que entrena desde hace años. En las ciudades marítimas, está permitido caminar junto al mar y realizar deportes dentro de él, pero no bañarse de forma recreativa.

Desde el epicentro de las zigzagueantes y estrechas calles de Malasaña, que alberga a la Plaza 2 de Mayo, los vecinos buscaban llegar a las avenidas más amplias que en forma de triángulo contienen este barrio tan castizo como hipster. Un movimiento inverso al que ocurre en esta fecha, en que se celebra el Día de la Comunidad de Madrid, cuando Malasaña, que recibe su nombre en honor a una heroína de la resistencia, se convierte en una fiesta y lugar de reunión.

En Puerta de Sol, donde está la sede de gobierno madrileño, la presidenta de la comunidad, Isabel Díaz Ayuso, recordó la histórica fecha de 1808 y rindió homenaje a los "nuevos héroes" de Madrid y España: las personas y colectivos que han estado en primera línea en los hospitales. La soprano Ainhoa Artera interpretó el "Ave María" y luego Ayuso destacó: "Con orgullo, dolor y esperanza, les digo: 'Hemos resistido'". La líder regional fue duramente criticada junto con otros funcionarios tras la concurrida despedida realizada ayer en Ifema, el hospital de campaña, que cerró sus puertas.

A esa misma hora presentaba un informe el director del Centro de Coordinación de Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, que sufrió un ataque de tos en plena conferencia televisada en vivo. España registró en las últimas 24 horas 276 muertes y computa un total de 25.100.

Lentamente, se produce "la vuelta a la normalidad", como expresó Sánchez, y cada quien festeja a su modo este regreso. Sofía dejó de fumar en enero y desde entonces, asegura, siente más apetito que nunca. A pesar de que hace diez días recibió la bicicleta fija (tardó un mes en recibirla), añoraba caminar a ritmo acelerado para bajar la ansiedad. Algunos más prudentes, atentos a las noticias, que anunciaban las aglomeraciones, esperaron a la franja vespertina para salir a dar un paseo en busca de mayor tranquilidad en las calles.

Una buena noticia es que las farmacias lograron abastecerse con mascarillas: 0,90 centavos de euro cuesta la desechable; 6,90, la de alta protección de un solo uso, y 9,90, la de tela que sirve para 30 usos. También muchos supermercados venden la caja de 50 unidades a 30 euros. De todos modos, el gobierno repartirá seis millones de mascarillas en el transporte público. "Ahora viene una etapa en la que recuperaremos poco a poco espacios sociales donde serán centrales el control y la responsabilidad", concluyó Sánchez.