China ataca a Kamchatka: cómo es el "país" más enigmático del TEG
Quienes jugaron alguna vez al TEG se habrán preguntado qué es esa región al este de Asia que pareciera ser el fin del mundo, esa misma región que en el juego de mesa permitía alcanzar el continente americano a través del Océano Pacífico.
Kamchatka es una península con tan pocos habitantes que el gobierno ha hecho planes para poblarla. Además, puede jactarse de ser la única batalla ganada por el ejército ruso en la Guerra de Crimea y fue el escenario de un histórico encuentro del presidente ruso, Vladimir Putin , con un oso.
Esta península volcánica de 1250 kilómetros de longitud está situada en el Extremo Oriente ruso. La separan de Moscú 11 husos horarios. Habitan la región aproximadamente 402.500 habitantes, esencialmente rusos, con una minoría de koryaks en el norte. La parte volcánica de la península está inscrita en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde 1997.
Administrativamente la península de Kamtchacka es en un krais del Estado ruso. Esta unidad federal rusa se formó después de un referéndum que tuvo lugar en 2005 y que aprobó la fusión del óblast de Kamchatka y el distrito autónomo de Koriakia
Los óblast y los krais rusos son dos de las seis formas que tienen los sujetos federales rusos que difieren entre sí por el grado de autonomía. Las unidades más independientes del gobierno central son las 22 repúblicas que tiene su propia Constitución, presidente y parlamento; están representadas por el gobierno federal en los asuntos internacionales; y se consideran el hogar de una etnia minoritaria específica. Luego vienen los óblast y los krais que tienen un grado de autonomía y derechos similares.
La mayoría de los habitantes residen en la capital administrativa, Petropávlovsk-Kamchatski. Los sectores de mayor actividad económica son la pesca, la silvicultura, el turismo (una industria en pleno crecimiento) y el ejército.
En 2016 el estado federal ruso tomó medidas en donde se implicó el mismo Putín para dotar de mayor población esta región remota ubicada en en el este aún más lejano que Siberia.
La BBC publicó una nota en donde detallaba que el presidente ruso le regalaba un pedazo de tierra a todos los habitantes de su país con una sola condición: que la utilicen y la trabajen con fines productivos. Se trataba de la ley 119-FZ que establecía además que los terrenos deben estar ubicados a menos 10 kilómetros de las áreas urbanas con 50.000 habitantes y al menos 20 kilómetros de aquellas con 300.000 pobladores o más. La fe en el éxito de este programa residía para las autoridades rusas en que la región de Siberia al oeste de Kamchatka se pobló con políticas del estilo.
Su geografía hace de la región un lugar tan espectacular como peligroso por ser una península volcánica muy proclive a los terremotos.
La península tiene altos puntos de intéres para el turismo sobre todo para los amantes de la montaña. Escalar volcanos activos, caminar en los valles a los que únicamente se puede acceder en helicóptero y nadar en aguas termales son algunas de las actividades que se pueden hacer en estas tierras enigmáticas que el TEG se encargó de ubicar en el fin del mundo.
Otro de los atractivos de la región es su vida salvaje y el testigo más sobresaliente fue Putin que en 2018 visitó la región para la grabación de un documental.Mientras se lo filmaba pescando (sus gélidos gestos apenas dejan ver su emoción), la cámara se dio vuelta un oso salvaje caminaba en paz sobre un río de baja profundidad.
Otro dato de color se remite al sigo XIX cuando Kamchatka fue una de las pocas victorias del ejército ruso en la Guerra de Crimea. Cuando las tropas anglofrancesas desembarcaron en el puerto de Petropavlovsky las fuerzas rusas lograron resistir y hacer retroceder a su enemigo.
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